Cómo comprarte un coche sin sacrificar tus finanzas personales

 

 

Adquirir el coche que deseas es posible no tiene que ser una sentencia para tu cartera, si haces un análisis de qué tipo de vehículo puedes costear y planeas correctamente tu presupuesto.

 

 

El aumento de la inflación, así como la inestabilidad por temas políticos y económicos ponen un freno importante para muchos mexicanos que quieren adquirir un automóvil, pero buenas prácticas y la planeación son la receta para no preocuparte por eso.

 

 

“Lo más importante cuando decides comprar un auto es analizar todas tus opciones, desde cuál es el coche que mejor se adapta a lo que buscas, hasta a través de qué medio adquirirlo”, asegura Loreanne García, directora de estrategia y cofundadora de KAVAK. “Como compradores tenemos muchas herramientas que nos permiten realizar una compra más informada y menos riesgosa para nuestras finanzas”.

 

 

Hacer tu plan financiero requiere de otras consideraciones importantes, por ello, Ana Cortés, experta en reprogramación financiera y finanzas personales, comparte algunos otros puntos básicos:

 

 

Nuevo vs. usado – Considera comprar un coche usado

 

 

“Cuando un auto nuevo sale de la agencia va a perder entre 15 y 30% del valor aproximadamente. Si perder esa cantidad se compensa con otros ingresos o por tu deseo de tener un coche del año, puede que funcione para ti; pero si estás buscando el modo de cuidar tu dinero, lo mejor es optar por un auto usado”, explica Cortés.

 

 

La recomendación es adquirir un auto de un año o dos años anteriores, verificando que la persona que lo vende haya tenido buenos cuidados. De acuerdo con estimaciones de Kavak, en México se comercializan más de 5 millones de autos usados al año, por lo que para asegurarte que tu inversión está bien cuidada debes valerte de profesionales que respalden que tenga buen estado estético, eléctrico y mecánico, y que además esté “limpio”.

 

 

El auto de tus sueños también se adapta a tus necesidades

 

 

Ajustar tu presupuesto no significa que tengas que adquirir algo que no te satisface. El problema es planear toda tu compra con base a un carro que te gusta, pero que no tienes la posibilidad de comprar, dice la experta.

 

 

“Casi todas las decisiones de compra que tomamos son primordialmente emocionales, 90% de las veces ni siquiera las razonamos”, argumenta recomendando que primero pienses en cuál es la necesidad básica que quieres cubrir, como ir al trabajo, llevar a tus hijos a la escuela o salir a carretera. “En cambio, si tienes un presupuesto robusto, puedes darte el gusto de guiarte por el lujo o tu deseo, si no, lo mejor es decidir lo más inteligente y congruente con tu economía”.

 

 

Planea cuánto destinar a tu compra

 

 

El límite para destinar a la compra de un auto es 10% de tus ingresos. “Hay quienes suelen recomendar hasta 15 o 20%, pero ten en mente que a ese número debes aumentar los costos del seguro, mantenimiento, imprevistos, placas y todos los demás gastos por impuestos. Esto incrementa la inversión a 25% o 27%”, explica.

 

 

Compensa los gastos

 

 

Una vez que inviertes, los expertos aconsejan encontrar una alternativas para balancear tu finanzas.“Debes enfocarte en buscar otro ingresos que puedan compensar tu egresos, como vender algo o hacer freelance; yo suelo recomendar ganancias de capital, pues es lo más rápido y lo más sencillo”, indica Ana Cortés.

 

 

Redacción

 

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