Por: Jesús Luna, Socio de la Práctica de Asesoría Contable y Mercados de Capital de y Jorge Lara, Director de la Práctica de Asesoría Contable y Mercados de Capital de KPMG en México
El Programa “Mercado de deuda para Empresas” de la Secretaría de Economía (SE) representa una gran oportunidad para que las empresas medianas mexicanas tengan acceso a servicios de consultoría necesarios para dejar al negocio en condiciones de emitir deuda en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV). Los posibles candidatos saben que una oferta exitosa en el mercado de deuda puede ser el punto de partida para que la compañía alcance su máximo potencial.
El programa, creado por la SE, tiene como objetivo financiar la institucionalización e instalación de Gobierno Corporativo en la empresa a través del pago de servicios profesionales, equipamiento y sistemas que ayuden a fortalecerla para que se convierta en candidato de emisión de deuda en la BMV.
Al convertirse en una compañía candidata de emisión de deuda, se abre un abanico de posibilidades de financiamiento, del cual la empresa podrá elegir lo que más le favorezca en su crecimiento y expansión.
Los conceptos financiables son los siguientes:
a) Servicios profesionales: Gobierno Corporativo, documentación de procesos, finanzas corporativas, auditoría y servicios jurídicos.
b) Sistemas tipo ERP (Enterprise Resource Planning): licencias de software, hardware y consultoría; excepto sistemas CRM (Customer Relationship Management).
c) Calificación de deuda, realizada por alguna de las calificadoras reconocidas por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
d) Costos de emisión: cuotas de la BMV, cuotas de la CNBV, intermediarios financieros, entre otros.
El monto máximo a financiar por empresa es de hasta 90% del costo total del programa de trabajo, o hasta 10 millones de pesos. La empresa beneficiada deberá aportar como mínimo 10% del costo total del programa de trabajo. Para la operación de este programa, la SE destinará recursos a través del FOCIR, el cual administrará los recursos con el apoyo de la AMEXCAP (operadora del programa).
El pasado 16 de julio de 2012, la SE lanzó la segunda convocatoria 2012 que estará abierta hasta el 15 de octubre de 2012, en la cual podrán registrarse las empresas listas para concursar de acuerdo al proceso de inscripción.
El proceso de colocación de valores
De acuerdo a KPMG, 81% de los Directores Ejecutivos de Finanzas, y 62% de los Directores Generales que han tenido la experiencia de vivir un proceso de colocación de valores, admitieron que más del 50% de su tiempo lo dedicaron a la colocación de dicha deuda, descuidando las necesidades diarias del negocio. Por lo anterior, es importante contar con un rango de ejecutivos capaces de monitorear la continuidad del negocio con el apoyo de un tercero que cuente con la experiencia en este tipo de procesos, mientras dichos tomadores de decisiones se ocupan de hacer atractiva la empresa para los potenciales inversionistas.
El proceso de colocación de títulos de deuda consume mucho tiempo de los ejecutivos y de la gerencia, lo que a veces hace más complicado el proceso. En nuestra experiencia, el proceso de colocación de valores requiere de una inversión de tiempo que se puede dividir en 2 fases:
Fase 1: Preparación de la estructura corporativa
Fase 2: Estructuración de la oferta de valores
La primera fase debe verse como una inversión que fortalecerá internamente a la empresa y que vale la pena hacer independientemente de la colocación de deuda, ya que lleva a la empresa a una posición más favorable para aprovechar la ventana de oportunidad cuando ésta se presente.
- Respecto a la preparación de la estructura corporativa, son cuatro los aspectos fundamentales que debe considerar una empresa que planea colocar sus títulos de deuda: Plataforma de Gobierno Corporativo; definición y establecimiento del ambiente y estructura de Gobierno Corporativo para alinearse a regulaciones como el Código de Mejores Prácticas Corporativas o la Ley del Mercado de Valores.
- Sistemas de información; contar con una plataforma tecnológica con la capacidad suficiente de emitir información periódica en los tiempos requeridos y con la calidad esperada.
- Plan de negocios y estructura de capital. Preparación del documento sobre el cual el público inversionista analiza los riesgos y beneficios de adquirir la deuda de la empresa emisora.
- Fortalecimiento del proceso de reporte financiero. Generación de información financiera de calidad y con la periodicidad que establecen las Disposiciones Generales de la CNBV.
La segunda fase es necesario entenderla en cuanto a tiempos, actividades y costos para poder llevar a cabo la colocación en el momento que sea necesario. En esta fase se debe definir cuál va a ser la estructura de salida en términos del tipo de instrumento de deuda que se va a utilizar, el plazo, garantías y el ente económico emisor. Asimismo, se deberá preparar un prospecto de colocación, obtener una calificación por parte de alguna calificadora de prestigio e iniciar el proceso de registro con la CNBV.
Para garantizar un proceso de colocación con los mayores beneficios, es importante que las empresas preparen su estructura corporativa identificando las áreas de oportunidad en cada uno de los 4 aspectos fundamentales de los que hablamos anteriormente, los cuales ayudan a proyectar el valor justo de su negocio. Es importante contar con la experiencia en colocación de títulos de deuda o buscar asesoría especializada y entender los factores que pueden atraer o disuadir a un inversionista, reforzando los mismos, haciendo atractivo su negocio. Es básico entender el proceso de colocación de deuda y aprovechar las ventanas de oportunidad en estos tiempos de alta volatilidad.