Convertir una idea en una empresa y consolidar un negocio exitoso es un enorme desafío. Según datos del INEGI ocho de cada diez nuevas empresas mexicanas no resiste su primer año de vida y de aquellas que lo logran, 7 de cada 10 no supera los 5 años de existencia. ¿Cuál es la razón de que unos conquisten la meta y otros no?
Nuestro negocio empezó hace 35 años con una pequeña empresa de compra-venta y recuperación de papel y cartón. Poco tiempo después, al conocer mejor el negocio del reciclaje, cambiamos el giro del negocio hacia los subproductos de zinc y aluminio, así surgió ARZYZ.
Hemos recorrido un largo camino hasta convertirnos en uno de los principales proveedores de aluminio en el país. Desde nuestros inicios hemos trabajado con el objetivo de marcar la diferencia en la industria, entregando a nuestros clientes un producto que satisfaga las necesidades y supere sus expectativas.
Basándome en la experiencia que los años de trabajo, investigación y desarrollo empresarial me han dejado, comparto a continuación 4 claves que fueron un parteaguas para el cimiento de una empresa exitosa.
1.- Investigar y conocer. El catalizador de un negocio exitoso es la visión de crear algo innovador y único. Esto requiere de investigación y conocimiento. Es imprescindible el entendimiento de la industria, el proceso, las necesidades del mercado al que se dirige y las tendencias.
2.- Inversión = Innovación. Para lograr resultados óptimos hay que ser el mejor, el primero o el único en proporcionar un producto o servicio. La inversión de tiempo, dinero y esfuerzo da la pauta para conseguirlo.
3.- Generar oportunidades-ventajas. Todas las industrias tienen dificultades como la competencia, los índices de calidad, las exigencias del mercado, entre otros factores que se pueden transformar fácilmente en ventajas.
4.- Actitud de excelencia. Entregar más de lo que el cliente pide significa sorprenderlos, esto se logra al identificar por adelantado cómo mejorar el producto o servicio. Es cuestión de actitud, si das tu mayor esfuerzo para lograr el objetivo, aún en el entorno más complicado, lo conseguirás.
El éxito del emprendimiento se basa en mantener un camino bien marcado, aprovechando cada una de las fortalezas y aptitudes de un equipo de trabajo que contribuya alcanzar las metas planteadas, por el bienestar de todos y cada uno.
Hay que recordar que para consolidar un negocio el crecimiento no es una opción, es un deber, un compromiso con uno mismo, con las personas que integran la empresa, la comunidad y el país.
Por Mario Sergio Ramírez Zablah, Presidente Ejecutivo y Fundador de ARZYZ
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