Las start-ups se han posicionado como las favoritas para desarrollar la carrera profesional. El número de profesionales que trabajan en start-ups ha crecido más de un 20% en los últimos 12 meses y la mitad de los profesionales preferiría la experiencia de trabajar en una start-up a la estabilidad de ser empleado por una empresa consolidada.
Robert Walters, consultora de reclutamiento especializado organizó el webinar La competencia por el talento, ¿por qué las start-ups están ganando la carrera? donde líderes de start-ups como Pau Rodríguez, CEO de MethinksAI; Carlos Schaaf, Country Manager Chile de SumUp; Leonardo Estrada, CEO de holacash; y Ana Clara Franco, People Director de Mudafy, compartieron las estrategias principales y recomendaciones sobre cómo pueden las organizaciones tradicionales adaptarse e innovar para atraer talento. El evento fue moderado por Raquel Fernández, Senior Manager en la división de Tecnología en Walters People España, y por Felipe Jaramillo, Head of Sales & Marketing recruitment en Robert Walters México.
El 42% de los profesionales quiere trabajar en una cultura que le inspire a dar lo mejor de sí mismo
De acuerdo a la guía Digital del Grupo Robert Walters Actúa como una Start-up y Consigue el Mejor Talento, los profesionales encuestados declararon que quieren trabajar en una cultura que les inspire a dar lo mejor de sí mismos (42%) mientras mantienen su autonomía en sus proyectos (28%). También quieren recibir un reconocimiento más allá del salario y las bonificaciones.
Las start-ups no tienen gran número de empleados, por lo que sus colaboradores deben completar cualquier tarea que sea necesaria, independientemente de su cargo o puesto de trabajo. El entorno de múltiples funciones tiene sus ventajas, desde realizar una función de recursos humanos un día, hasta ayudar al desarrollo comercial al día siguiente. Las start-ups enseñan a los empleados los entresijos de una empresa, aumentando su valor como profesionales
Si bien es posible que las start-ups a veces no ofrezcan un salario atractivo por adelantado, sí brindan un entorno de trabajo diferenciado y lleno de retos. El 43% de los profesionales encuestados dijo que el entorno de trabajo desafiante que se experimenta dentro de una start-up es el resultado del panorama empresarial en constante cambio.
Para Carlos Schaaf, Country Manager Chile de SumUp, una start-up fintech que ayuda a que pequeños comercios puedan aceptar pagos con tarjetas, crear un plan de carrera, comunicar los skills que se esperan, entender hacia dónde se quieren mover los empleados y dar oportunidades para movimientos regionales, abre una oportunidad al crecimiento y a encontrar nuevos desafíos.
Por su parte, Clara Franco, People Director de Mudafy, un start-up que ha cambiado el paradigma del mercado inmobiliario, comenta que para atraer talento, comenzaron por referidos de sus empleados y han procurado buscar talento con “espíritu emprendedor” y que puedan hacer un cultural fit con la organización.
Para Leonardo Estrada, CEO de Hola Cash, una start-up fintech mexicana, lo más importante es que los empleados sean los embajadores, ya que hablarán bien de la organización. “La actitud es muy valiosa y es algo que no se puede enseñar”, comenta Leonardo.
Por otro lado, Pau Rodríguez, CEO de la start-up MethinksAI, una empresa de inteligencia artificial aplicada al diagnóstico de ictus, recomienda entender el sentido de las cosas, especializarse, tener sentido de responsabilidad y autogestión. “Crecer antes de pedir”, matiza Pau.
La verdadera innovación no puede darse sin profesionales altamente capacitados
La innovación, por su propia naturaleza, es arriesgada. Según una investigación de Harvard, casi el 75% de todas las start-ups fracasan. Sin embargo, el fracaso es parte integral del éxito de aquellos que sobreviven. Es la cultura del fracaso de las start-ups lo que impulsa la innovación.
La verdadera innovación no puede darse sin empleados altamente capacitados que estén equipados con las habilidades, la tecnología y las herramientas necesarias para dar los saltos en la creatividad que conducen a la innovación real.
Según Deloitte, las empresas que optan por el aprendizaje continuo tienen un 92% más de probabilidades de innovar. Una cultura de aprendizaje continuo es su fuerte, porque las start-ups ofrecen una experiencia de aprendizaje real y dinámico a los empleados.
Pau considera que innovar es pensar fuera de la caja – ¿por qué hacemos las cosas? – romper el paradigma sobre fracasar, hacer lo máximo y preguntarse si se está resolviendo el problema real. Leonardo sugiere ser disruptivos y Carlos invita a retarse y cuestionar todo: “equivócate, pero hazlo de forma inteligente”, declara.
La cultura start-up derriba barreras y obstáculos de crecimiento
“Cuando un candidato apuesta por una start-up, normalmente lo hace porque busca una compañía people-oriented”, declara Felipe Jaramillo, Head of Sales & Marketing recruitment en Robert Walters México y uno de los moderadores del webinar.
Dado que las start-ups suelen estar dirigidas por un pequeño equipo que trabaja en estrecha colaboración, su «cultura» suele ser un reflejo de las pasiones y personalidades del equipo fundador. En la mayoría de las situaciones, cada individuo que trabaja en una start-up contribuye a la cultura general de esta.
Los cuatro factores clave que conforman la cultura ideal de una start-up son:
- Pasión: Es lo que define la existencia de la empresa y actúa como un gran motivador para el equipo.
- Personalidad: Es lo que hace que la start-up sea única y que no pueda encontrarse en ningún otro lugar.
- Agilidad: Es la capacidad de que el conocimiento y la información fluyan a un ritmo que mejora considerablemente la empresa. Es el factor más visible, ya que se puede identificar en la forma en que trabajan los trabajadores, se organizan las oficinas y se realizan las sesiones de lluvia de ideas.
- Autenticidad: La libertad y el respeto a la propia identidad de cada individuo. Las empresas burocráticas suelen tener procesos para todo y una estricta cadena de toma de decisiones. Lo contrario está dentro de los valores de la cultura de las start-ups.
Para crear una cultura sólida, Clara recomienda ofrecer experiencias minuto a minuto, generar cercanía con cada líder, tener reuniones, ofrecer beneficios alineados sin importar el momento de vida con foco en el bienestar y escuchar feedback. Por su parte, Carlos sugiere “comer, cenar y desayunar cultura, establecer los valores fundamentales y compartirlos desde el inicio del proceso. Además de involucrar a más miembros del equipo en la selección de nuevos perfiles”.
¿Te imaginas jugar con tu equipo a Mario Kart en el cine? ¿Tener un partido en un estadio? ¿Hacer ejercicio en un helipuerto? Así lo hacen en la start-up de Leonardo, que invita a pensar en beneficios que puedan ofrecer experiencias donde los empleados puedan relacionarse fuera del trabajo, con el objetivo de fortalecer la pertenencia de equipo.
Cuando se le pregunta a los ponentes sobre su visión de futuro, Pau invita a las organizaciones a seguir evolucionando y que la dirección ejecutiva pueda predicar con el ejemplo.
Felipe añade que los empleados serán más productivos y felices cuando tienen sentido de pertenencia y saben que forman parte de algo más grande.
Raquel Fernández, Senior Manager en la división de Tecnología en Walters People España y una de las moderadoras del evento, concluye recordando que la salud mental de los empleados es algo que debe trabajarse en mayor medida dentro de las organizaciones. También destaca la importancia de conseguir que los trabajadores sean los embajadores de la organización: “las habilidades y competencias suman, la actitud multiplica”.
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