Caravana, café que transporta es un proyecto que cuenta con un modelo de integración vertical y encadenamiento productivo con los objetivos de incrementar y diversificar los ingresos de pequeños productores chiapanecos y ser una opción de emprendimiento atractivo para nuevos inversionistas.
Con esto en mente, con el fin de impulsar el desarrollo económico sostenible de más de mil familias de 35 comunidades Tsotsiles y Tsetsales de los Altos de Chiapas, en conjunto con Fomento Social de Citibanamex, Caravana Café, Unión Majomut e Impact Hub presentó Caravana, una red de cafeterías móviles que opera bajo un modelo de negocio inclusivo que promueve el consumo consciente y responsable del café mexicano.
“Proyecto Caravana se creó como un emprendimiento social en que iniciamos en el 2016 y teníamos una conexión con Unión Majomut; los productores del café chiapaneco quienes exportan café de alta calidad, pero faltaban comercializar su café en la Ciudad de México. En el camino, encontramos a Rosy Cantú, quien, con su experiencia, instaló a los carritos móviles adentro de las instalaciones de algunas empresas. De esta manera, creemos que el país puede salir adelante cuidando a las comunidades, biodiversidad con un mayor ingreso y nosotros fuimos facilitadores de la creación de este concepto”, mencionó Vanessa González, directora de Fomento Social de Citibanamex.
Durante el evento, Rosy Cantú, Socio Gerente de Caravana, comentó: “Somos una red de cafeterías móviles, hoy tenemos tres puntos de venta en la Ciudad de México y lo que hacemos en un modelo de integración vertical y el beneficio de la venta llegue a las familias productoras. Nuestros puntos de venta están diseñados para ofrecer servicios con un café de calidad, de manera eficiente, atractiva y a precios competitivos.”
“Las micro empresas que están involucradas en cada Caravana son los proveedores. Hoy estamos trabajando con cuatro microempresas que son los que nos proveen alimentos por ejemplo más la microempresa que nos provee los vasos biodegradables, los jarabes, el chocolate que también es una empresa chiapaneca familiar. La idea es que Caravana esté desarrollando los emprendimientos de los productos complementarios para poder surtir a toda la red que tenemos contemplada”, señaló Cantú.
El principal reto de Caravana fue desarrollar un modelo que fuera operativo y eficiente, que tuviera la parte del diseño y rentable. Otro reto fue también desarrollar una oferta de valor que estuviera adecuada a instituciones donde pudieran ofrecer su servicio. Los planes que se están manejando a corto plazo es colocar sus unidades móviles de cafetería en la ciudad de Monterrey.
Vanessa González finalizó: “Nosotros empezamos a apoyar el emprendimiento social y ya conocíamos a la Unión Majomut y queríamos ayudarlos a comercializar en México. Entonces, los financiamos para poderlo traer a la Ciudad de México y expandirlo a otras grandes ciudades. Nosotros lo que hemos hecho es financiar sin esperar nada a cambio, es nuestra labor de Fomento Social Citibanamex que otorga donativos para potenciar el crecimiento económico, mejora los ingresos, producción sostenible con todo un programa de emprendimiento social. Entonces, queríamos unir los dos mundos el de la comunidad y la cooperativa productora con el modelo de emprendimiento.”
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