Actualmente Amazon es la empresa que más invierte en innovación en el mundo,destinando el 12% de sus ganancias (16 billones de dólares aprox.), comenta Ariel Fleichman socio de la consultora Strategy& en Pricewaterhouse Coopers en el panel “La clave del futuro” del Congreso de Innovación.
Agrega: “Hay tres cosas que distinguen a una empresa innovadora: conectar la innovación a la estrategia de la empresa, buscar que la innovación permee en el modelo de negocio e innovar desde la cultura”. Amazon siempre se pregunta “¿Qué no va a cambiar en un mundo de cambios?” en ello está la clave de su éxito. Investiga, anticipa, escucha a sus clientes y vislumbra nuevas posibilidades.
Para innovar, no basta una tener una idea novedosa, sino debemos aplicarla creando o mejorando productos, procesos o servicios que el mercado valore. Cuando se utiliza tecnología para llevar a cabo los cambios en las organizaciones hablamos de innovación tecnológica.
Comúnmente se piensa como tecnología en máquinas y aparatos, pero en realidad es mucho más que eso. Tecnología es un conocimiento científico cuya aplicación está orientada a resolver problemas específicos, es decir, teorías y técnicas, instrumentos y procedimientos, para el saber hacer. Si una empresa no se adapta a la transformación digital y al nuevo mundo interconectado, previendo cambios, simplemente no tiene futuro. Pensemos en empresas como Kodak, Atari, Olivetti o Blockbuster, que no supieron reconocer oportunidades y cambios para generar ganancias; ¿qué es de ellas?
Los avances tecnológicos, la globalización, la intensificación de la competencia y el tener consumidores más exigentes y mejor informados, provoca que las organizaciones requieran mayor competitividad; para ello un factor determinante es precisamente la generación de innovación continua como motor de crecimiento económico, que no va ligado al pensamiento de “muchos lo están haciendo” sino a la actitud y cultura de la organización de invertir en investigación y desarrollo, para incrementar los conocimientos y convertirlos en fuentes de desarrollo, productividad y equidad en la organizaciones y/o países.
México es un país que invierte poco en investigación, ciencia y tecnología, por eso no sorprende el lugar 58 que ocupa (de 127 economías) en el Global Innovation Index 2017. Los retos principales son: la inversión, la infraestructura, la vinculación entre Academia y la industria, la comunicación, el contar con capital humano calificado y sobre todo la voluntad política, para estar más cercanos a los países más innovadores del mundo: Suiza, Suecia, Los Países Bajos, E.U. y Gran Bretaña.
En esta misma línea, la mayoría de las empresas mexicanas tampoco destinan esfuerzos en innovación. El fundador de BIG, Markenting Inteligente, estima que solamente el 5% de las empresas en México han desarrollado algún tipo de innovación y muy pocas han logrado algún cambio disruptivo.
Para que no quede alguna duda contestando la pregunta del título de este artículo podemos cerrar con el MIT Technology Review escrito por Antonio Nuñez: “Hoja de ruta para la Cuarta Revolución Industrial : digitalizarse o desaparecer”, el cual enfatiza que los CEO que no apuesten por la transformación tecnológica de sus empresas en su modelo de negocio probablemente no subsistirán.
Mtra. Ma. Luisa Ruiz Calleja, Académica de la Facultad de Responsabilidad Social de la Universidad Anáhuac México.
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