La digitalización se ha erigido como un pilar fundamental para el crecimiento y la competitividad de las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (MiPyMEs) en México, según revela un estudio reciente llevado a cabo por CONTPAQi®, una plataforma líder en software empresarial y contable en el país. El informe, titulado “MiPyMEs en México: desafíos y oportunidades para su digitalización comercial en 2024”, destaca cómo la adopción de herramientas digitales está impulsando las ventas en aproximadamente un 80% de estos negocios, ofreciendo nuevas perspectivas y áreas de mejora.
La investigación, realizada entre más de 350 organizaciones ubicadas en Ciudad de México, Guadalajara, Monterrey y León, revela que las empresas que han optado por la digitalización de sus procesos comerciales tienen una ventaja significativa sobre aquellas que no lo han hecho. Estas compañías muestran una mayor resiliencia en momentos económicos adversos, contribuyendo así al dinamismo de la actividad económica en el país. Entre los beneficios clave destacan la expansión del mercado, un mejor control de costos y gastos, así como una mejora palpable en la experiencia del cliente.
René Martín Torres Fragoso, presidente ejecutivo de CONTPAQi®, enfatiza la importancia estratégica de la digitalización para las MiPyMEs, especialmente en un entorno empresarial cada vez más digitalizado. Destaca que las empresas que han abrazado esta transformación están mejor posicionadas para afrontar los desafíos futuros y capitalizar las nuevas oportunidades que se presenten en el panorama empresarial digital del país.
Según el informe, el proceso de digitalización ya está en marcha, con un 50% de las MiPyMEs iniciando sus operaciones con al menos algún grado de digitalización en sus procesos comerciales. Para el 90% de estas empresas, la digitalización en el área comercial se traduce en mayores oportunidades de crecimiento. El reporte también resalta la digitalización en otros segmentos clave como facturación, inventarios, contabilidad, cobranza y atención al cliente.
Sin embargo, el camino hacia la digitalización no está exento de desafíos. Entre los principales obstáculos que enfrentan las MiPyMEs se encuentran la necesidad de darse a conocer, superar a la competencia, adaptarse a nuevas tecnologías, capacitar al personal e innovar constantemente.
El estudio también arroja luz sobre el perfil empresarial predominante en México, liderado mayoritariamente por la generación X, seguida por los millennials y en menor medida, los centennials. Las empresas dirigidas por la generación X, que abarca el rango de edad de 43 a 60 años, son reconocidas por su compromiso, adaptabilidad e independencia, características que las hacen fundamentales para la economía nacional.
Por otro lado, el estudio resalta la importancia de la paridad de género en el entorno laboral de las MiPyMEs, con un creciente número de mujeres ocupando puestos clave dentro de estas organizaciones. Asimismo, se destaca el papel crucial de las redes sociales como canal de ventas principal para el 89% de las MiPyMEs encuestadas, seguido de WhatsApp, tiendas físicas y sitios web.
En un contexto post-pandemia, el estudio también aborda temas emergentes como el trabajo desde casa, que ha llegado para quedarse en el ámbito comercial. Se destaca que el 38% de los negocios encuestados han adoptado esta modalidad, con beneficios evidentes en términos de productividad y equilibrio entre trabajo y vida personal.
Finalmente, el informe subraya la importancia de la felicidad laboral y el bienestar de los colaboradores como elementos clave para el éxito empresarial. La creación de un ambiente laboral positivo y el fomento de la felicidad entre los empleados se erigen como pilares fundamentales para alcanzar resultados excepcionales y contribuir al desarrollo integral del ecosistema empresarial mexicano.
En conclusión, el estudio de CONTPAQi® pone de relieve el papel crucial de la digitalización en el crecimiento y la resiliencia de las MiPyMEs en México. En un contexto de cambio constante, la innovación y la adaptabilidad se presentan como las claves del futuro empresarial, donde las MiPyMEs no solo son actores económicos cruciales, sino también agentes de cambio y progreso en la economía nacional.
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