En opinión de Gabriel González Aragón, experto en derecho corporativo, quien impartió la conferencia “El impacto de la crisis económica actual en el sector empresarial de México”, señaló que existen aciertos y desaciertos de las administraciones del país y de Estados Unidos.
Las complicaciones financieras que tuvieron como punto de partida a Estados Unidos y cuyos impactos se han extendido en diferentes países, fueron el tema central de la conferencia que impartió el experto en derecho corporativo Gabriel González Aragón, “El impacto de la crisis económica actual en el sector empresarial de México”, impartida en el ITESO el pasado martes 23 de junio, como parte del Seminario de actualización para egresados de Derecho.
El expositor, quien cuenta con un master oficial en Derecho Empresarial por la Universidad Autónoma de Madrid y es egresado de la Universidad Iberoamericana, campus ciudad de México, comenzó por aclarar que los errores y aciertos de un país en materia de participación en los mercados financieros “en muchas ocasiones son fruto de especulaciones psicológicas. La actual crisis que golpea a tantos países, comenzó en Estados Unidos y el detonador fue una mala interpretación del poder, hubo mucho de soberbia en la toma de decisiones”, explicó.
González Aragón, quien ha trabajado en diferentes compañías como Telefónica MoviStar México, a cargo de la Subgerencia jurídica de contratos; la firma de abogados Santamarina y Steta, así como en Landlife Corporation, como director jurídico, comentó sobre las decisiones del anterior gobierno de Estados Unidos, que influyeron en el desarrollo de la actual crisis. “Creyeron que podían reactivar su economía, a raíz de la desaceleración fruto de la caída de las torres gemelas en septiembre de 2001, reduciendo sus tasas de interés para incentivar el consumo. Apostaron al exceso de liquidez, no consideraron que habría deudores moratorios y pensaron que el apalancamiento de la banca de inversión no generaría efectos negativos”, añadió.
También explicó que la actual situación financiera internacional ha puesto en evidencia la dependencia de México hacia Estados Unidos. Señaló que durante el sexenio de Vicente Fox las firmas de convenios y acuerdos “giraron” hacia la Unión Europea, quizá con la finalidad de no depender tanto de la Unión Americana. “Sin embargo no fue así, otros países en vías de desarrollo, como Brasil, han logrado independizarse un poco y los dilemas que ahora enfrentan son distintos”, explicó.
Entre los efectos que el país enfrenta respecto a la crisis y que considera más graves, González Aragón destacó la disminución de remesas debido a la caída de empleos en el país vecino, particularmente en el sector de bienes raíces. Otros aspectos mencionados fueron la afectación en el precio y la cantidad del petróleo que se compra; la baja de actividades en la industria automotriz por el recorte de gastos del consumidor y bajas en la industria de consumo duradero. Sin embargo, dijo que la actual administración federal ha tenido aciertos, como mantener niveles moderados de deuda pública, o el ahorro parcial de excedentes de petróleo, un fruto del sexenio pasado; incentivos fiscales y la realización de subastas de dólares. “El más importante de todos es el blindaje económico, existe una línea de crédito con el Fondo Monetario Internacional por la cantidad de 40 mil millones de dólares y eso manda un mensaje de confianza a inversionistas y habitantes de este país, porque habla de capacidad de pago”, agregó.
Señaló que el derecho empresarial -que controla las conductas de particulares- tiene en el poder público, que prohíbe o autoriza, un riesgo de arbitrariedad y es importante continuar avanzando hacia un “gobierno corporativo”, en el que destaque el rendimiento de inversiones, pues de no lograrlo el costo para el país será alto.
A manera de cierre, el experto comentó que a pesar de que hay cierto avance, aún falta mucho por hacer en materia de cultura de información financiera pues muchos usuarios de créditos y opciones similares, desconocen términos básicos como la tasa de interés establecida por su banco. “(El nivel de información financiera de los ciudadanos) ha mejorado gracias a la existencia de la Condusef, los bancos quieren evitar problemas y comienzan a ofrecer más atención a los clientes, lo mismo sucede en otras circunstancias como pagos de impuestos y acercamientos entre la Secretaría de Hacienda y el público en general”, concluyó.
Redacción