Las tecnologías de la información están suponiendo un gran aliado para pymes y empresas que, gracias a su apuesta e inversión en inteligencia artificial y, también, en big data, están siendo capaces de buscar caminos de predicción para su futura demanda o decisiones.
Esto, algo que parece solo viable en el caso de compañías dedicadas al entorno digital, está teniendo, sin embargo, una gran repercusión en sectores como el de las flotas de vehículos empresariales.
La posibilidad que tienen hoy en día de conseguir una información veraz y, sobre todo, de utilidad es infinita.
Gracias, por ejemplo, al software de seguimiento de activos, las empresas que contratan los servicios de transporte de sus mercancías, son capaces de poder disponer de datos reales sobre la ubicación de los productos.
Con el uso de energía propia en la mayoría de casos es capaz de crear alertas de geocercas que permiten conocer las ubicaciones históricas, inventario o los activos sin uso.
Además, permite detectar robos en caso de que sucedan, lo que ayuda a recuperar la mercancía no solo en tiempo récord sino en más del 90% de las situaciones.
Sin duda, es el camino hacia los modelos predictivos, lo que significa buscar dentro de la información disponible patrones que sirvan para crear rutinas que mejoren el rendimiento no solo de las flotas sino de tiempos y hagan crecer la facturación.
La reducción de riesgos que consigue el análisis de datos es clave para la planificación de estrategias a medio y largo plazo. De hecho, la verdadera revolución del transporte terrestre viene de la mano de este tipo de técnicas y, sobre todo, del uso de cierta información que antes o bien no podía usarse por falta de conocimiento o bien porque ni siquiera se podía acceder a todo eso.
“Conducciones eficientes que ahorren combustible, rutas que amorticen el trayecto con varias entregas o recogidas, un seguimiento en tiempo real vía gps que permita modificar la ruta en caso de retenciones, accidentes o problemas en la calzada o incluso la mejora de tiempos a la hora de empezar el registro de un conductor vía reconocimiento facial son solo algunos de los avances que se están incorporando gracias a empresas como la nuestra” explican desde Samsara.
Los resultados cuando se aplica esta inversión no tardan en llegar, consiguiendo que los clientes decidan confiar en los servicios.
Sin duda, el transporte terrestre está en pleno auge. Desde México, además, se está estableciendo una red de hubs que no solo quieren competir como la logística del continente sino como la fábrica de camiones y componentes de piezas mecánicas gracias a una inversión alta en fábricas de última generación que están respondiendo a la creciente demanda tanto de Norteamérica como de Latino América.
Después de una época en la que la cadena de suministro estuvo comprometida, la ventaja de poder contar con una estructura de fábrica y almacén en el centro del continente será clave para seguir creciendo a nivel económico. Es una oportunidad que México no está dispuesto a perder.
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