La portabilidad numérica es uno de los mecanismos más eficientes para promover la competencia entre diversos proveedores de telecomunicaciones. Las experiencias a nivel mundial demuestran que efectivamente se convierte en una oferta atractiva para los suscriptores al poder conservar su número telefónico. Por contraste, para los operadores, los beneficios son proporcionales a la cantidad de usuarios que hacen uso de esta facilidad.
Factores como el precio que el usuario debe pagar por el servicio, el grado de competencia de la industria móvil en cada país y cuán perdurable y fiable es el proceso de portabilidad por parte de los agentes involucrados, conforman el éxito de este modelo que se viene aplicando desde 1996.
La portabilidad numérica es quizá uno de los mayores desafíos que ha enfrentado el sector de las telecomunicaciones en los últimos años. A ella se han suscrito países de la Unión Europea, Estados Unidos, Corea, recientemente Brasil y hace cerca de un año tres meses en México, que en el afán de favorecer la libre elección de los clientes y consumidores han otorgado al suscriptor la posibilidad de conservar su número telefónico al cambiar de operador de servicios.
La experiencia internacional ha demostrado que la portabilidad – en sus modalidades fija y móvil- es un mecanismo efectivo para fomentar la competencia en materia de telecomunicaciones, proporcionando al sector planes tarifarios más competitivos, reducción de costos para usuarios que desean cambiar de proveedor; mejora en el nivel de servicio y calidad de la red. Todo ello se transforma en una oferta atractiva para el usuario.
Según algunos análisis, en la mayoría de los países donde la portabilidad ha sido un éxito, es en aquellos modelos donde los costos administrativos y el tiempo para hacer efectiva la portabilidad han sido menores, tal es el caso de Hong Kong, Finlandia y Dinamarca.
Latinoamérica ha entrado en este esquema de competencia de servicios, con la ventaja de conocer las mejores características del sistema a partir del aprendizaje obtenido de implementaciones realizadas a nivel mundial.
En México, a doce años de la primera implementación en el mundo, México se constituyó, en julio de 2008, en el primer país de la región en adoptar este modelo. Según cifras registradas por la Cofetel (Comisión Federal de Telecomunicaciones), al 2 de octubre de esta liberalización del servicio se portaron 1 millón 2 mil 591 usuarios, de los cuales más de 60 por ciento corresponden a móviles de prepago; 35 por ciento a fijos de post pago; 4 por ciento a móvil post pago y el resto a teléfonos fijos de prepago.
La portabilidad se incorporó en un momento en que el mercado de las telecomunicaciones experimentaba una fuerte competencia, dado a la acción de nuevos operadores. Tal es el caso de las empresas de cable que en los últimos tres años han captado alrededor del 1.6 % de los usuarios de telefonía fija, registrándose crecimientos superiores al 15% anual.
En este contexto donde los nuevos competidores amplían sostenidamente sus inversiones y coberturas, ha provocado la disminución de los precios de los servicios hasta en un 30%. A esta particularidad, se agregan también las condiciones presentes en el país, que a juicio de los analistas, es un factor gravitante a la hora de estimar la masividad o éxito de la migración numérica en los próximos años.
Ante esta situación, se estima que en los próximos años llegarán a portarse hasta 2.5 millones de líneas, cifra que está por debajo de los 4.5 millones proyectados antes de liberar la modalidad. Pese a ello, a los operadores se les abre nuevas oportunidades para mejorar la calidad de sus servicios, incrementar la oferta de sus productos, no sólo a través de la captación de usuarios ya existentes y retención de los mismos, sino a través de la atracción de aquellos posibles suscriptores no alcanzados por razones de cobertura o precio. La cifra motivadora es que hasta el 2 de octubre de este año se han realizado 1 millón 2 mil 591 portaciones efectivas.
¿Cuál ha sido la experiencia en otros países?
La Portabilidad Numérica se ha implantado en varios países de forma exitosa, con el propósito de fomentar una competencia más equitativa entre los proveedores de servicios de telecomunicaciones, lo que a su vez se traduce en mejores tarifas, más servicios de telecomunicaciones y un uso más eficiente de la numeración, entre otros.
En Estados Unidos, la portabilidad en telefonía fija está vigente desde 1996 y la de telefonía móvil desde 2003. Para el 2004 se habían portado 21 millones de usuarios.
En el caso europeo, el Parlamento Europeo solicitó desde 1997 a los estados miembros que introdujeran la portabilidad en las líneas fijas y en 2002 en las redes de telefonía móvil.
Hasta el primer trimestre de 2003 se habían portado en Europa 5.8 millones de números móviles mientras que para 2004 ya se habían portado 13.5 millones, lo que refleja un incremento significativo en los números móviles portados.
Tasas de portabilidad entre el 5 al 15% anual se han logradas en países con un proceso de portabilidad efectivo, y bajo (hasta cero) coste para el usuario. Tasas inferiores de portabilidad ocurren cuando el proceso de portabilidad es pobre, como por ejemplo, Francia, Alemania, Reino Unido.
En este esquema de competencia de servicios, Latinoamérica ha entrado en igualdad de condiciones. Se prevé que 20 millones de líneas móviles serán portadas entre 2008 y 2013, siendo los mercados de Brasil, México, Argentina y Colombia los que aportarán el 85% de las portaciones en la región.
En este nuevo contexto competitivo, los costes de adquisición y retención de clientes se incrementarán. La experiencia de los modelos exitosos señala que la preocupación de los operadores se debe focalizar a mejorar la gestión del CHURN, especialmente en los primeros años, que es cuando deben sacar el mejor provecho de la portabilidad, reduciendo la amenaza del resto de competidores.
Everis