Durante siglos se ha dicho “es un genio ó está loco” lo mismo en casos como Da Vinci, Dalí o en Warhol o Napoleón, todos y cada uno de ellos han rayado en la locura, pero en realidad lo que hicieron fue INNOVAR, cambiar la forma de ver o actuar en sociedad, creando sus propias reglas o cambiando las existentes, pero para poder lograr ese cambio de paradigmas se necesita algo inherente, la creatividad.
Al lado de la creatividad esta la innovación, al lado de la innovación está la diferencia, Al lado de la diferencia está la locura; innovar es crear, es atreverse a hacer lo que los demás no se atreven; ahí radica el valor de la diferencia, el valor de hacer aquello, lo que los otros no se atreven y llaman locura.
Pero antes de hacer cambios locuaces en la empresa es necesario platear algunos pasos previos. Aquí tres consideraciones para innovar en tu empresa.
1.- ¿Qué quieres lograr? Tener una idea muy clara de hacia dónde vas
2.- Abrirte internamente, poner a trabajar a todos los equipos en las ideas, cada uno aportará su parte y será algo mucho más estructurado
3.- Estar dispuestos a trabajar con las ideas de otros, para seguir adelante y así ganar mercado
Con estos tres pasos podemos entonces sí envolvernos en una espiral de creatividad, algo que las empresas pregonan pero pocas tienen, lo que la mayoría busca, pero solo algunos tienen, la creatividad, la cual surge de la necesidad.
Sí hoy día digo que la necesidad es la madre de la creatividad, por tanto de la innovación, la cual está asociada a la genialidad y a la locura de la diferencia, acuñé la siguiente idea solo de esta posibilidad, me encantaría que el mundo fuera mucho más innovador, mucho más creativo, porque necesidades tenemos, pero como las solucionamos ahí está la diferencia de la mente de cada uno de nosotros.
Mtro. Felipe Augusto Torres Rodríguez.
Consultor en Estrategia y Alta Dirección
felipeaugustot@gmail.com
@PhillipeTours