Aunque no es una tarea agradable, cuando una persona no es capaz de cumplir con las actividades a las que fue asignado, crea conflictos en el ambiente laboral o se destaca por una actitud irresponsable, lo más sano para la empresa es prescindir de él. Para evitar problemas posteriores y hacer este proceso más sencillo, te presentamos algunos consejos útiles en la desvinculación de los trabajadores.
Las firma Solutions Consultant y BizMantra sabe que una de las tareas menos deseadas por los gerentes son los despidos, por lo cual es factible primero ofrecer opciones al empleado, advertir de su bajo desempeño, intentar incluso asignarle tareas nuevas; pero cuando el trabajador no mejora después de meses de asesoría, capacitación y documentación, sólo queda enfrentar la situación.
Cuando la razón del despido es consecuencia del comportamiento del empleado debido a un desempeño insatisfactorio, las firmas señalan que puede interpretarse de dos maneras: que el trabajador no puede realizar sus labores, aun después de entrenamiento; o que no logra llevarse bien con los demás, incluso luego de haberle ofrecido asesoramiento.
Y es que una buena empresa debería primero hablar con el empleado por mecanismos formales e informales y acordar en conjunto planes que permitan mejorar el desempeño del trabajador. Por lo delicado del tema se aconseja hacer notas de las conversaciones, los acuerdos, y sus observaciones, para poder tomar decisiones en caso de que no se presente un cambio positivo. Llevando a cabo el proceso anterior no se toma por sorpresa al empleado.
Por supuesto, no es posible esperar que el trabajador tome una actitud serena ante la pérdida de su empleo; por ello Solutions Consultant y BizMantra propone los siguientes consejos como guía para manejar una situación difícil:
- Con las razones para el despido, prepara una carta de desvinculación.
- Planifica la reunión.
- Cuando el empleado se presente ve directo al punto, no hables de trivialidades.
- Prepárate para una reacción de impacto y negación, súplicas y llanto, o incluso furia.
- Si es posible, pregunta al empleado si prefiere renunciar en lugar de ser despedido.
- Entrega al empleado la carta que preparaste.
- Concluye la reunión.
Considera que aunque la situación sea incómoda, se trata de un beneficio para tu empresa y los empleados que son productivos, pues el ambiente mejorará y podrán lograr un mejor desempeño en sus tareas al ya no tener que cubrir la irresponsabilidad del trabajador al que se despide.
“Aunque los despidos nunca parecen ser una situación positiva, lo pueden ser cuando se hacen profesionalmente; además, cuando el despido se hace con dignidad y cortesía, le da al empleado una importante oportunidad de encontrar un puesto mejor de acuerdo a sus capacidades”, señalan los especialistas.
Ariadna Cruz