Las papelerías, misceláneas, talleres, kioskos o cualquier negocio que vende a granel o directamente a clientes encuentra en las Terminales Punto de Venta (TPV) una forma práctica de cobrar y no arriesgar el efectivo ante la ola de inseguridad; pero hasta el momento ninguna entidad financiera realiza un esfuerzo real por ofrecer una oferta comercial conveniente a los micronegocios.
A finales del año pasado, la firma Mastercard presentó una iniciativa interesante en conjunto de una financiera popular a fin de llevar terminales punto de venta a negocios en ciudades cercanas a zonas marginales, la cual representa un buen esfuerzo que veremos en el futuro cercano.
Aunque mito, pero en términos reales uno de los inhibidores de la incorporación de TPV a los micronegocios son las comisiones; para Mauricio Braverman, director Ejecutivo de Desarrollo de Productos de Visa para México se trata de la mitificación de comisiones altas, las cuales están indicadas en un tabulador en la página del Banco de México y que son menores al 3%, mismas que encontramos las que refieren a tarjetas de débito en el siguiente link:
Banxico TPV comisión por débito
Banxico TPV comisión por crédito
Todo depende del banco y el tipo de servicio que en algunos casos supera el porcentaje antes señalado, como lo indica HSBC en su tabla:
De acuerdo con Visa, el uso de moneda electrónica favorece las compras del alto valor, reducción del uso de cheques, disminución de asistencias al banco, reducción del uso de efectivo lo cual implica mayor seguridad, mejoramiento del flujo de efectivo y hasta obtención de crédito por un buen historial.
En lo que refiere a inseguridad de pagos electrónicos como clonación, Braverman comentó que hoy las tarjetas integran un microcircuito lo cual evita su duplicidad.
Fernando Heredia