Como empresario consciente de esta época, tu responsabilidad va más allá de las funciones tradicionales, hoy como empresario, debes pensar en el desarrollo sustentable.
Éste término, acuñado por vez primera en 1987 en el Informe Bruntland, usado hoy en día como desarrollo sostenible o sustentable de manera indistinta, no es un concepto que esté de moda o que resulte pasajero; es un concepto que debe permear prácticamente a todas las organizaciones y ser parte de su nueva forma de ser.
El principio es: Satisfacer las necesidades de las generaciones presentes sin comprometer las posibilidades de las del futuro para atender sus propias necesidades.
El ámbito del desarrollo sostenible puede dividirse conceptualmente en tres partes: ecológico, económico y social. Se considera el aspecto social por la relación entre el bienestar social con el medio ambiente y la bonanza económica. El triple resultado es un conjunto de indicadores de desempeño de una organización en las tres áreas.
Como empresario, jamás puedes descuidar el aspecto económico, la utilidad que genera la organización como su razón de existir, ya que de lo contrario no puede mantener su objeto ni cumplir con los otros dos ámbitos; pero si descuidas éstos, tampoco podrás cumplir con el primero o al menos no por mucho tiempo ya que tu misión como empresa quedará incompleta y será insostenible.
El enfoque ecológico o de respeto al ambiente podría ser más o menos claro dependiendo el giro de la industria, comercio o servicios en que te desempeñes, pero esencialmente estamos hablando de un cuidado y eficiencia en el uso de recursos energéticos de cualquier tipo, así como la implantación y aplicación de energías alternativas y emergentes; lo cual no claramente se vincula a los otros aspectos.
Finalmente el enfoque social, quizá el que parecería más accesible para atender, está enfocado no sólo a nuestra empresa, sino a nuestro entorno, a nuestro país y a nuestro mundo. En México es conocido que entre el 80 y 90 % de los empleos los generan las micro, pequeñas y medianas empresas, corresponde a éstas, no sólo el generar empleos sino asegurar que los mismos sean estables, bien capacitados y dignamente remunerados.
Hoy como empresario, debes de pensar en tu entorno y en lo que generas, pero sin descuidar ni atu equipo ni tu rentabilidad.
Enrique U. Alcázar
. Director general y presidente de alcázar & compañía.
. Consultor certificado por la Asociación Mexicana de Franquicias y la Secretaría de Economía en el Programa Nacional de Franquicias.
enrique@alcazar.com.mx