Según cifras del Banco Mundial, en Latinoamérica, cerca de 30 millones de personas entre 15 y 24 años forman parte del denominado grupo “ni-ni” que corresponde a la población que ni estudia ni trabaja. En el caso particular de México sólo uno de cada tres jóvenes tiene educación superior. Por otra parte, resalta que diversas áreas gerenciales o puestos estratégicos de una empresa son ocupadas por personas pertenecientes a la primera generación nativa digital, ya que se adaptan fácilmente a la tecnología sin que represente un proceso disruptivo.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) destaca que de la totalidad de los millennials mexicanos, 63.2% son económicamente activos, actualizan sus conocimientos sin la necesidad de grandes inversiones en tiempo y dinero, cumplen con las exigencias generacionales y fomenta la capacitación y retención de talento.
Es una realidad que todas las compañías, sin importar tamaño e industria, deben adaptarse a los cambios para desarrollar actividades similares como comprar, vender, crear relaciones con los clientes, administrar personal, realizar campañas de marketing y desarrollo del branding de la marca, entre otras, por lo que el capital humano requiere estar preparado.
Actualmente, la educación en línea (e-learning) genera la posibilidad de que cualquier persona con acceso a Internet pueda especializarse y ser más competitivo en su ramo, además de integrarse a la creciente demanda por opciones digitales para el rubro creativo, corporativo y educativo tradicional. Los profesionales necesitan herramientas ágiles de aprendizaje para mantenerse actualizados a la par de la velocidad de la innovación tecnológica, así como considerar que está cambiando la forma en que trabajamos.
La reciente Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo del INEGI muestra que cerca de 5.8 millones de personas tienen disponibilidad para trabajar, lo que muestra que esta nueva generación tiene un amplio espacio de acción para entrenarse vía online y generar ingresos, en especial los estudiantes de nivel medio y superior.
Deloitte en su más reciente edición del Millennial Survey 2017, comparte que los millennials creen que el uso de la tecnología traerá más oportunidades que riesgos, siendo la flexibilidad una característica fundamental para su vida laboral, al generar un mejor desempeño organizacional, beneficios personales y un mayor grado de lealtad hacia la empresa. Además, un informe del Foro Económico Mundial muestra que los avances tecnológicos les permitirán prosperar en el escenario de la cuarta revolución industrial (Industria 4.0) donde se identifican como las tres principales habilidades necesarias la compleja resolución de problemas, el pensamiento crítico y la creatividad, esta última siendo el “podio de las habilidades futuras”.
Ante este escenario, se ha fortalecido el sector educativo con la transformación digital (DX) al construir cursos basados en proyectos y casos prácticos, donde los estudiantes aprenden y aplican rápidamente las habilidades que necesitan para obtener mejores oportunidades de empleo. Estos cursos en línea son totalmente funcionales, prácticos y eficientes sobre una plataforma de aprendizaje a la carta para que los aspirantes profesionales accedan a una formación hecha a su medida y construida por expertos de la industria.
Para actualizarse, se recomienda que las plataformas de “e-learning” contengan los siguientes elementos:
1.- Adaptabilidad: Al vivir en un mundo móvil e hiperconectado, esta generación quiere información que pueda consumir de forma rápida y a través de cualquier dispositivo, por lo que poder tomar cursos con mayor disponibilidad y aprender nuevas habilidades desde cualquier ubicación, ayudará a potenciar sus oportunidades en el mercado laboral y aprender a su propio ritmo. Los millennials valoran la flexibilidad de horarios y su capacidad para elegir cuándo y cómo trabajar.
2.- Actualización: Como una generación que lleva la tecnología en su ADN, están conscientes de los alcances de esta para el entrenamiento y la capacitación, no solo de conocimientos, sino de competencias. Entender la movilidad, el IoT (Internet de las Cosas), la Inteligencia Artificial (IA) y la nube, entre otras tendencias TI, son y serán pan comido, aunque “la vieja escuela” siempre trae consigo gran experiencia que se puede capitalizar en los cursos online.
3.- Globalizado: La omnipresencia de los profesionales siempre ha resultado divertida y comulgar con el mismo idioma ayudará a desarrollar sus capacidades de creatividad e innovación. Hacerlo con personas de otras partes del planeta, diferentes experiencias y puntos de vista, permitirá desde otra perspectiva potencializar sus habilidades.
4.- Compartido: No es otra cosa que ser empático con el conocimiento que se tiene. El mejor maestro es aquel que comparte su conocimiento y experiencia con alguien más con el fin de mejorar nuestro entorno; siempre la mejor forma de aprender es a través de la comunicación y colaboración para compartir.
Hoy más que nunca no se debe escatimar en entrenamiento y capacitación, ya que entre los principales problemas que enfrentan los emprendedores actuales es que no cuentan con la experiencia y preparación para desarrollar sus proyectos, por lo que destinar una inversión en educación dará grandes beneficios y una visión 360 de la estrategia de negocio. La capacitación en línea se reflejará en 2 vías, una de desarrollo personal y otra empresarial al tener un incremento de la productividad, calidad del trabajo, estabilidad de la organización y cumplimiento de las metas de negocio.
Por: Diego Olcese, director general de Crehana
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