Considerando que en México el 90% de las empresas son familiares y la mayoría carece de una cultura de gobierno corporativo, que las obliga a cerrar prematuramente; en 2011 la Fundación Heres impulsó la celebración del primer Día Internacional de la Empresa Familiar, cuyo objetivo principal fue despertar consciencia respecto a la importancia que tiene la continuidad de estas compañías en el entorno económico, político, social y cultural.