La Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC) considera que no se podrá lograr la reactivación económica sin tomar en cuenta el contexto del país y del mundo. El año pasado el canal de abasto moderno del país se fisuró y algunas franquicias abandonaron el Buen Fin.
Superficialmente se ha dicho que fue por un problema de pago de cuotas, pero la realidad es otra, el resquebrajamiento del Buen Fin obedece y corresponde a la trituración y pauperización del consumo nacional. Las disputas por las ventas son cada vez más atroces, garantizar inventarios de mercancía es más complicado que nunca, esto es un doble reto: tener que vender y vender, declaró Cuauhtémoc Rivera, presidente de ANPEC.
La pandemia de Covid vino a reconfigurar el mercado mexicano debido al “Quédate en casa”, la escasa movilidad en el 2020 y parte del 2021 se tradujo en una dramática caída del consumo. La ecuación es simple, a mayor movilidad mayor oportunidad de consumo; a menor movilidad, desplome del consumo. En lo que va de la pandemia el consumo se ha contraído, provocando cierre de miles de negocios y pérdida de millones de empleos que, a la fecha, no se han recuperado.
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Un fantasma recorre la actividad comercial y económica de nuestro país, el fantasma de la Inflación. Originalmente las autoridades se empeñaban en decir una y otra vez que tenían bajo control la inflación a un digito no mayor del 3%; sin embargo, la realidad los ha obligado a reconocer lo inocultable. La escalada inflacionaria va al alza a todo vapor, actualmente la inflación general rebasa el 6% y la no subyacente (referida a costo de alimentos y servicios) está por encima del 10%.
Son muchos los factores que explican este fenómeno: encarecimiento energético (gas, gasolinas y energía eléctrica); desabasto del carbón; factores estacionales; lo prolongado de la sequía; desabasto de insumos para la producción manufacturera y automotriz; embudo portuario que colapsa; suministro de avíos para la producción, dejando a miles de contenedores sin embarcar a su destino, entre otros.
“El rebrote pandémico, la cuarta ola que ahora azota a Eurasia (Rusia y China), colocando a México de cara a un riesgo mayor por la llegada de la temporada invernal y el semáforo verde “locuaz y desenfrenado” que vivimos nos coloca ante la inminente llegada de la cuarta ola Covid en los próximos meses de pronósticos reservados”, finalizó Rivera.
El corolario de todo esto es que la reactivación económica enfrenta un sin fin de obstáculos para materializarse. Pandemia, energía, avíos, suministros, empleos, poder adquisitivo y pobreza.
Momento difícil para la economía global, más aún, para nuestra economía. La realidad le está dando Jaque Mate al Buen Fin.
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