Los ciclos económicos actuales, en un entorno globalizado, en la mayoría de las ocasiones obedecen a factores externos como el ambiente local, por lo que el sector empresarial, independientemente de la industria a la que pertenezca, debe de estar preparado para aprovechar los momentos de bonanza, pero también para no verse afectado en situaciones críticas.
Entre los elementos a considerar para el logro de los objetivos empresariales, bajo cualquier situación, es la constante reducción de costos y el continuo incremento en el índice de ventas, a decir de Iván Gálvez, director general de Sintesys, empresa de consultoría en Outsourcing: “Las ventas y la disminución de costos constituyen elementos decisivos para medir la rentabilidad de las empresas, pero tales acciones deben llevarse a cabo de manera estratégica. Por ejemplo, no buscar una reducción sustentable de costos puede provocar grandes daños a la organización, ya que podría afectar el rendimiento o la motivación del personal, o incidir negativamente en las expectativas del cliente. Jack Welch, ex CEO de General Electric, decía que en tiempos de crisis no se debe quitar el queso de la pizza”.
El entorno en el que se desempeña la empresa puede causar, en tiempos de crisis, que los directivos decidan recortar presupuesto en dos áreas tradicionales: mercadotecnia y recursos humanos, a pesar de que ambas áreas son el motor de una compañía. “Asimismo, muchas compañías piensan también en los costos directos de los insumos, pero muy pocos consideran áreas importantes como las tecnologías de la información y procesos de BackOffice”.
Para Sintesys, el potencial de estas últimas áreas se fundamenta en estadísticas que indican que el 80 por ciento de los gastos de operación (Operational Expenditures) en dichos rubros se dedican a “mantener las luces prendidas”, esto es, simplemente se destinan a dejar las cosas como están, “y sólo el veinte por ciento restante se destina a actividades que generan valor para la empresa. Por lo tanto cualquier compañía inteligente debe buscar la forma de revertir esta tendencia”.
Como parte de su metodología, Sintesys recomienda algunas acciones como las siguientes:
1) Escuchar a los empleados – En la mayoría de las ocasiones ellos tienen propuestas que pueden ayudar a mejorar. Los empleados son los mejores consultores, pero se tiene que aprender a escucharlos.
2) Optimizar sus procesos – Hay que identificar un proceso crítico para la organización y tomarse el tiempo para mejorarlo. Cuando un proceso se ha optimizado, la empresa se puede dar cuenta porque cuesta menos, es más fácil su ejecución, y se reducen tiempos y riesgos de manera importante.
4) Utilizar la tecnología – Soluciones tecnológicas SIMPLES pueden ayudar a solventar una gran cantidad de problemas. Se debe buscar la automatización de procesos que son manuales y sujetos a error, y evitar usar la tecnología sólo por estar “a la vanguardia”.
5) Establecer una estrategia de Outsourcing – Esto no desde el punto de vista tradicional de subcontratación de personal para eliminar o reducirles los beneficios, sino desde el punto de vista de acercarse a un experto en la materia para traer conocimiento, productividad y eficiencia.
Las recomendaciones citadas conforman una serie de pasos que se ejecutan bajo el concepto de RightSourcing, el cual ha sido introducido por Sintesys en nuestro país, y que integran una serie de procesos que persiguen el propósito de reducir costos a través de mejoras en la productividad.
Redacción