Su habilidad para bordar y el apoyo que le brindó Fundación Realidad A.C. (FRAC), hicieron posible que Altagracia Claudio lograra consolidar su negocio, dedicado a la venta y elaboración de prendas como rebosos, gabanes, morrales y chalecos de lana. Hoy en día, su empresa ha conseguido tal éxito que se ha convertido en la fuente de trabajo para toda su familia.