Cuando se tiene un buena idea y ganas de emprender surgen muchas preguntas sobre la manera en que será más sencillo arrancar un negocio, entre ellas ¿lo logro por iniciativa propia o comparto el proceso con un socio?
La decisión depende de distintos factores, por ejemplo la cantidad de dinero con la que se cuenta, o las habilidades que se tienen, si estás considerando esta cuestión te recomendamos:
– No te aferres a hacerlo solo. Si tienes miedo a obtener un menor margen de ganancia o que alguien se meta con tus ideas ya estás cometiendo errores, un empresario exitoso está abierto a las opiniones y entiende que tiene que rodearse de un buen equipo para triunfar, si no tienes los recursos suficientes considera las opciones que más te convienen.
– Amistades. Negocios son negocios, aunque tu familia o mejores amigos se entusiasmen y te expresen sus ganas por ser parte de tu proyecto no dejes que esos lazos pongan en riesgo tu emprendimiento, si no cuentan con las habilidades para ser parte de tu equipo más vale que inicies solo.
– Empatía. Aun cuando la idea se haya formado en equipo cuando no hay compatibilidad en la manera de pensar más vale hacer un trato para que sólo alguno lleve a cabo la idea o se conviertan en competencia del otro. Los negocios más exitosos fueron desarrollados por personas que se conocían bien entre ellas por lo que había confianza y simpatía, si crees que será difícil trabajar con alguien cada día es mejor pensarlo más de dos veces.
– El cerebro y el realizador. Si tienes los conocimientos técnicos para iniciar un negocio pero te falta entender el mundo empresarial o viceversa es mejor que te alíes con algún experto, es preferible que conozcas a la persona, así sabrás qué esperar, aunque si no es posible existen encuentros en donde los emprendedores pueden relacionarse entre sí.
– Tiempo y dinero. Considera tus limitaciones, si es necesario que dediques a tu empresa más tiempo del que puedes o quieres dar y no tienes dinero para pagar a un empleado vale la pena que te asocies con alguien que te sustituya cuando sea necesario y sea consciente de que las ganancias no son inmediatas.
– Reglas claras. Si se tienen uno o más socios es muy importante que todos entiendan las condiciones, desde quién está poniendo más dinero hasta quién tomará la última decisión. Es mejor ponerlo por escrito para que no existan después malos entendidos que pongan en riesgo la continuidad de la empresa.
– El siguiente paso. Si ya iniciaste una empresa tú mismo pero consideras que está estancada puede ser momento de buscar un inversionista, la mayoría sólo apoya a proyectos con experiencia y buenos resultados, pero pueden darte el empujón que necesitas a cambio de acciones o una parte del negocio.
Ariadna Cruz
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Muchas gracias. ?Como puedo iniciar sesion?