Aquellas mujeres que venden sus catálogos, promoviendo diferentes productos, marcaron a diferentes generaciones que atestiguaron cómo madres de familia, compañeras de trabajo o vecinas podían generar ingresos con esta actividad y, además, cómo hoy siguen presentes y creciendo. Con el paso del tiempo y la tecnología, este tipo de venta directa se transformó, migró a lo digital y además de las páginas web, se crearon plataformas especializadas en el comercio electrónico.
En la celebración en el mes de abril del Emprendimiento, es importante dar visibilidad a aquellas mujeres que llevan a cabo esta titánica tarea y, para ello, hay que recordar que, en Latinoamérica, por un lado, las mujeres tienen menos oportunidades de incorporarse al ámbito laboral, y por el otro, la brecha salarial termina mermando sus ingresos.
De acuerdo con la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), durante el 2020 la participación de las mujeres en el mercado laboral en la región fue del 46% contra el 69% de los hombres, asimismo, la tasa de desempleo para ellas fue del 12%, mientras que para ellos representó el 9.7%.
Sin embargo, esto no las ha detenido, América Latina es la segunda región con más mujeres emprendedoras: de acuerdo con el Global Entrepreneurship Monitor (GEM), la tasa de participación durante el 2019 fue del 17.3%, contra el primer sitio de África Subsahariana con el 21.8%. México tiene una participación de mujeres emprendedoras en un 12%.
En 2018, del total de los establecimientos en México, 45% de las microempresas eran dirigidas por una mujer, mientras que 16% de las pequeñas y medianas empresas estaban a cargo de una emprendedora.
La tecnología a favor de las mujeres independientes
Uno de los grandes saltos de la economía se ha dado gracias al comercio electrónico. De acuerdo con Emarketer, América Latina es la segunda región con mayor crecimiento en ventas dentro del e-commerce con el 20.4%, lo que abre la oportunidad de diversificar las acciones para emprender fácilmente. Tan sólo en México, las ventas por internet o por catálogo generan cerca de 9.5 millones de pesos al día en ventas, de acuerdo con datos del Laboratorio de Análisis en Comercio, Economía y Negocios de la UNAM.
Dentro de este contexto sobresale Elenas, una plataforma que facilita el microemprendimiento digital entre las mujeres y desea empoderarlas para que alcancen la independencia financiera que se merecen, pues el hacerlo contribuye directamente a la igualdad de género, la erradicación de la pobreza y el crecimiento económico inclusivo, menciona ONU Mujeres.
Elenas funciona como un marketplace que fomenta las ventas sociales en Colombia y México, una tendencia que empuja el crecimiento del e-commerce en la región a través de un proceso sencillo y seguro, que facilita a las embajadoras convertirse en micro emprendedoras. Ellas tienen la posibilidad de vender hasta 80 mil productos disponibles la app de Elenas a través de redes sociales y sus redes personales como familiares, amigos, entre otros, por lo que la distribución, logística y pagos no son una preocupación para ellas.
Elenas impacta a México
En México, Elenas vio la luz en 2021, y hasta la fecha ya hay más de 60 mil usuarios registrados; el 78% son mujeres y el 12% son hombres. El rango de edad de los y las embajadoras en ambos países es de entre 24 y 35 años
Además de los beneficios económicos que representa ser embajadora de Elenas, cuyas ganancias en México se promedian en 4 mil pesos mexicanos mensuales, las implicaciones sociales, mentales y de autoestima permiten que puedan tener acceso a una mejor calidad de vida. En los últimos dos años, el número de embajadoras y embajadores ha crecido 300% a nivel regional.
“México tiene datos macroeconómicos como: el crecimiento de clase media, desempleo, faltas de oportunidades de emprender, equidad de género, entre otras. Queremos expandir las oportunidades, escuchar sus necesidades y lo que estamos creando es el impacto de trabajar con nosotros con una ganancia de 3,500 pesos al mes adicionales con una dedicación de tiempo significativo”, expresó Zach Oschin, CEO de Elenas.
Dentro de las barreras del emprendimiento destacan las dificultades para conseguir financiamiento, pero con Elenas no se necesita una inversión inicial, además que al ser una plataforma tecnológica permite el acceso a la economía digital sin requerir conocimientos especializados.
“Para las emprendedoras, pueden empezar sólo con la dedicación e interés de emprender y crecer con nosotros sin descuidar sus labores domésticas y de esa manera formar su negocio, compartir su catálogo personalizado en redes sociales sin la necesidad de salir de casa”, agregó Zach Oschin.
El crecimiento económico personal y comunitario es una labor conjunta, por lo que abrir cada vez mayores oportunidades para las mujeres y quienes deseen trabajar por su propia cuenta de la mano de la tecnología es importante y merece impulsarse.
“En México hay 3 millones de mujeres que venden por catálogo tradicional, porque estamos mejorando el portafolio, herramientas, servicios financieros, hacer diferentes alianzas, ofrecer más capacitación en la Universidad de Elenas y contar con más apoyo para que las emprendedoras ofrezcan mejores oportunidades con sus clientes”, concluyó Oschin.
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