De acuerdo con Arturo Vieyra, analista de Banamex, los resultados positivos del comercio exterior en septiembre: determinan que crecen los flujos comerciales menos que lo esperado y perfilan la desaceleración de la demanda externa, principalmente las exportaciones de manufacturas. El comportamiento de las importaciones no asociadas a la exportación fortalece las perspectivas de una gradual reactivación de la demanda interna en la segunda parte del año. Ello, en un contexto de un moderado déficit comercial.
Puntos clave:
Destaca la desaceleración de las exportaciones manufactureras. Su crecimiento anual de 21.6% estuvo por abajo de de nuestra expectativa y muy alejado del promedio anual de enero-septiembre (27.6%% y 33.4% respectivamente). Ello, confirma los temores sobre una desaceleración en la segunda parte del año, promovido por el menor nivel de actividad económica en EUA.
Las importaciones mostraron también un mayor dinamismo que el esperado: si bien aumentaron menos que nuestra expectativa (18.5% versus 25.6%) ello se debe al menor crecimiento de la actividad exportadora. Ya que el aumento anual de las exportaciones de bienes de consumo excluyendo energía (21.4%) y la paulatina reactivación de las compras de bienes de capital dan cuenta de la creciente, aunque pausada, activación de la demanda interna.
Las cifras desestacionalizadas por el INEGI apuntan una caída mensual de los flujos comerciales. Las exportaciones manufactureras en septiembre registraron un descenso mensual de 0.7%. El descenso va en línea con nuestra expectativa de una desaceleración de las exportaciones en la última parte del año. Las importaciones disminuyeron 1.4% mensual, aunque destaca el avance de las de bienes de capital de 1.36%.
En septiembre, se registró un déficit comercial menor que nuestra expectativa. En los primeros nueve meses del año se acumula un déficit comercial de 1,983 millones de dólares, que contrasta con el déficit de 4,628 millones de dólares registrado en el mismo periodo del año anterior.
Redacción