Según la última encuesta elaborada por Grupo Regus, proveedor de soluciones para lugares de trabajo, durante los últimos años el índice de rotación de los empleados mexicanos ha ido en aumento, por lo que entre 2011 y 2012, hasta 8 de cada 10 trabajadores piensan cambiar de empleo.
David de los Cobos, director de Ventas de Manpower México, afirma que la rotación se ha convertido en un ‘cáncer’ para las PyMEs, ya que la mayoría de éstas no cuentan con muchas fuentes de financiamiento y al despedir empleados constantemente, deben invertir sus recursos en los proceso de reclutamiento y capacitación pertinentes, en lugar de utilizar el capital para impulsar su crecimiento.
La investigación hecha por Grupo Regus, señala que entre los principales motivos de renuncia se encuentran la precariedad de los salarios, baja satisfacción laboral, nula o escasas oportunidades de crecimiento, sobrecarga laboral y hasta el tiempo invertido en los largos traslados de casa a oficina.
Sobre el mismo punto, la psicóloga industrial Martha Soriano explica: “por lo general, tras una excesiva rotación existe desmotivación, el empleado se siente insatisfecho por detalles que pudieran parecer insignificantes, pero que impactan su autoestima, como el hecho de nunca ser requerido para tomar un taller”.
Mateo Cuadras, director general de Bumeran México, señala otro detalle significativo tras la rotación de empleados: “es evidente que hay un desconocimiento de los empleados, debemos conocer qué los motiva. Las empresas deben invertir en eso, porque si no, al final se gasta dinero en otros aspectos, como en costos de rotación, empleados que no están rindiendo al 100%, o más capacitación”.
Ante dicha problemática, la Fundación ProEmpleo Productivo diseñó el programa de capacitación empresarial Supérate, que al ahondar en temas como desarrollo humano y habilidades de ventas, mejora el nivel de satisfacción laboral entre los empleados, disminuye la rotación e incrementa el nivel de satisfacción de los clientes.
Beneficios:
• Aumento de las ventas
• Mejora del ambiente laboral
• Disminución de renuncias y ausentismo
Esto se logra a través de un proceso que considera cuatro módulos:
1. Diagnóstico: Se elabora un análisis completo de la empresa en cuestión, para detectar sus necesidades específicas y determinar perfiles personales.
2. Adaptación: Se ajustan los programas en función del diagnóstico previo.
3. Impartición: Se imparten cursos teórico-prácticos con ejercicios y dinámicas de grupo apoyados por diversos medios audiovisuales.
4. Evaluación: Se realiza un examen intermedio para garantizar que el empresario sea capaz de transmitir los conocimientos adquiridos en su organización.
Cada módulo tiene una duración de 4 horas diarias, que se imparten durante 5 días hasta completar dos semanas.
Para consultar el temario de la capacitación u obtener mayor información, visitar la página de ProEmpleo o escribir a informes@proempleo.org.mx.
Karina Hernández Barrera
Información relacionada
[tubepress views=”false” title=”false” length=”false” video=”MePSDni4JU4″]