Los festejos por el Día de las Madres produjeron una derrama económica de hasta 600 millones de pesos, estimó la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo en Pequeño de la Ciudad de México (CANACOPE).
Según el organismo, habitualmente la actividad económica presenta un despunte significativo en tal fecha, debido a que gran parte de la estructura comercial y de servicios y se mueve gracias a los festejos.
No obstante, las celebraciones por el 10 de mayo sólo habrían representado buenas expectativas para el 27% de los pequeños comerciantes, ya que tradicionalmente los giros con mayor actividad son aquéllos dedicados a la venta de flores, dulces, regalos, ropa, calzado, cosméticos, artículos para el hogar y comida; los cuales estimaron un repunte en sus ventas de hasta 20%.
Así, “es predecible que este año la derrama económica será de 600 millones de pesos, esto es un 200% más que en 2009, toda vez que el año anterior sufríamos los efectos del paro económico generado por la epidemia de la influenza AH1N1”, sostuvo la CANACOPE en un comunicado de prensa.
Reconocen a las madres empresarias
Aprovechando las celebraciones por el Día de las Madres, en el mismo documento el organismo hizo un reconocimiento público al trabajo que llevan a cabo más de 100 mil mujeres empresarias -quienes en su mayoría cuentan ya con una familia- en el sector productivo capitalino.
Y es que durante los últimos tres años el rol de la población femenina en el ramo comercial ha adquirido cada vez más importancia, pues tan sólo en 2006 las mujeres que atendían el pequeño comercio representaban el 60% y, para 2009 tal cifra llegó hasta el 67%.
“Esto significa que un alto porcentaje de dueños o encargados del pequeño comercio son mujeres, muchas de ellas madres y cabezas de familia”, puntualizó la CANACOPE.
Ante los datos referidos, el organismo consideró que tales fechas deben “convocar a nuestras autoridades a diseñar programas que incluyan el desarrollo de todas las mujeres, atendiendo sus necesidades de salud, desarrollo económico y oportunidades de autoempleo; particularmente en el caso de las madres, que por sus características no se encuentran incluidas en muchos de los programas sociales vigentes”.
Karina Hernández Barrera