El COVID-19 cambió la forma en la que operan ocho de cada 10 empresas en México, según una encuesta realizada por HSBC; no obstante, muchas de ellas han tomado como guía las nuevas formas de trabajo que han puesto en marcha empresas extranjeras, sobre todo las que se ubican en regiones donde el virus llegó primero.
La pandemia ha amenazado la estabilidad laboral en todo el mundo, el buen manejo del personal y la capacidad de resiliencia de cada empresa es vital para garantizar condiciones laborales dignas así como la productividad de los negocios.
“La forma en la que las empresas coordinen a sus empleados a través de nuevas dinámicas de trabajo, tendrá un papel decisivo en la nueva normalidad y en la lucha contra el COVID-19. No se trata sólo de velar por conservar las fuentes de empleo y operatividad de las empresas, sino también de contener a la enfermedad y con ello garantizar un mejor futuro para todos”, señala Andrea Rojas, Head de Recursos Humanos (RRHH) en Runa, plataforma de nómina y gestión de Recursos Humanos.
Las empresas tienen un doble compromiso, por un lado cuidar de la salud y bienestar de sus trabajadores y clientes, pero también conservar la actividad económica sin que esto represente un potencial riesgo de contagio.
De acuerdo con el 23° informe Coyuntura Laboral en América Latina y el Caribe. La dinámica laboral en una crisis de características inéditas: desafíos de política, de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el virus golpeó a los mercados laborales de América Latina y el Caribe de una forma que no se había visto en casi 100 años.
En este sentido el organismo propone estimular el crecimiento del empleo con un enfoque sostenible y apoyado en el uso de nuevas tecnologías para desarrollar mejores capacidades productivas y aumentar la competitividad.
La especialista de Runa concluye: “hoy más que nunca las empresas deben rediseñar sus políticas y dinámicas de trabajo; deben conectar más con sus empleados y trabajar de la mano con ellos. Sin duda las empresas extranjeras que ya han cambiado su forma de trabajo son un gran ejemplo de lo que podemos implementar en el país, podemos tomarlas como guía y aprender de sus aciertos y errores para diseñar y ejecutar los nuevos trabajos que se requieren para salir más fortalecidos de esta crisis”.
Redacción
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