Para nadie es un secreto que un buen número de microempresas dependen totalmente de su dueño para trabajar. Si bien este es un paso natural cuando una empresa comienza a operar, también es importante que el pymempresario trabaje para dar el paso de autoempleado a dueño de un negocio, sin morir en el intento.
De acuerdo con Jorge Guadarrama, Coach de Negocios de ActionCOACH, el momento donde el dueño de un negocio puede ausentarse por un periodo de tiempo prolongado y que éste siga funcionando igual o incluso mejor que si él estuviera, es donde el emprendedor puede considerarse a sí mismo dueño de su propia empresa.
Para lograrlo, lo importante es apalancarse, es decir, hacer más con menos. Lo ideal para toda microempresa es que el director sea sólo eso, pues de esta forma podrá dedicarse a hacerlo crecer. Para lograrlo se puede trabajar en varias áreas:
Capacitación: los negocios que han crecido y han sido exitosos son aquellos donde hay una inversión importante en capacitación, comenzando por el dueño. Es importante entrenarse, y para ello existen diversos métodos: leer literatura de negocios y de la propia industria, asistir a seminarios, tomar entrenamientos formales (como cursos, diplomados, maestrías, etc.), relacionarse con grandes empresarios del mismo ramo y, por supuesto, contratar a un coach de negocios.
Sistemas y procesos: es sumamente importante que la operación de un negocio no dependa de las personas sino de procesos de trabajo bien establecidos y documentados. Para comenzar a deslindarse, el empresario debe crear manuales donde se reflejen dichos métodos.
Equipo de trabajo: aunque parece evidente, es de suma importancia invertir en formar un equipo en el que el empresario pueda confiar plenamente; es básico contar con las personas adecuadas para cada puesto, basados en sus intereses y habilidades, y asegurar que estas personas estén comprometidas con el proyecto.
Tecnología: hay proyectos donde las herramientas tecnológicas son fundamentales; por ejemplo, en una microempresa dedicada a la producción de bienes (cualquiera que este sea), requiere contar con la maquinaria y equipo más adecuada. Pero esto aplica también para aquellas dedicadas al comercio o a los servicios, pues si cuentan con computadoras, smartphones o software que faciliten la comunicación y la administración del negocio, será más sencillo dedicar más tiempo desarrollar el negocio.
Es importante considerar que los emprendedores triunfadores son aquellos que han logrado hacer cosas diferentes, pero con foco en los objetivos planteados al crear la empresa y, sobre todo, quienes han apalancado su crecimiento en los puntos antes mencionados. Las habilidades para dirigir una empresa siempre se pueden aprender, sólo es cuestión de adquirir las herramientas para lograrlo.
Itzel Castellanos