Existen diversos tipos de convocatorias para empresas o proyectos emprendedores. Las convocatorias más comunes están diseñadas para acceder a fondos públicos o mixtos y para concursar por reconocimientos.
Las convocatorias para acceder a fondos sirven como una alternativa de financiamiento para invertir en infraestructura (maquinaria y equipo, aumento en el número de personal, compra de licencias de software, equipo de transporte, entre otros elementos), capacitación especializada que contribuya a que la empresa desarrolle alguna ventaja competitiva, para contratar consultoría especializada, exportación, desarrollo tecnológico, etc.
Para decidir en qué fondo participar es necesario analizar la convocatoria y los requisitos que exige cumplir, si está dirigida al tipo de proyecto o empresa que tenemos y si contamos con la aportación concurrente que puede pedir, en su caso.
Las convocatorias para concursar por reconocimientos generalmente representan prestigio para la empresa o el emprendedor y el proyecto; algunas veces otorgan algunos fondos para financiamiento o acceso a inversionistas, además de la difusión.
Para decidir en qué convocatoria por reconocimiento participar es necesario analizar si se trata de un premio que efectivamente puede dar el prestigio o el apoyo que buscamos. Si no es así, tal vez no valga la pena hacer el esfuerzo por participar.
Una vez que el emprendedor o empresario ha decidido participar en alguna convocatoria, es muy importante seguir algunas recomendaciones que le permitirán aumentar su probabilidad de éxito:
– Tener claramente pensado el proyecto. Cuando la idea sobre el proyecto es confusa, será muy difícil plantearlo y presentarlo, más aun, estimar la inversión y el tamaño del negocio.
– Considerar que es necesario asignarle tiempo y recursos a la preparación de la propuesta de proyecto que participará en la convocatoria elegida.
– Integrar un equipo de trabajo que cuente con los conocimientos y el compromiso para que la propuesta concluya en tiempo y forma.
– Gestionar los trámites administrativos necesarios, tales como poderes notariales, constancias de no adeudos fiscales, identificaciones actualizadas, cartas de colaboración o alianzas, etc.
– Cuando no se cuenta con los conocimientos o las habilidades para formular un proyecto, es necesario acudir a un consultor. Aquí es muy importante tener cuidado con la selección de consultores y evaluarlos considerando su experiencia profesional, es decir, que tengan experiencia formulando proyectos sobre el área de conocimiento que se requiere (no contratar un consultor experto en la producción y comercialización de chocolates, para formular un proyecto relacionado con la preparación de vacunas) y recuerda que el consultor que te cobra menos no es necesariamente el adecuado. Lo importante es que te ayude a aumentar la posibilidad de éxito en equilibrio con los costos de su servicio.
– Prepárate o prepara a un miembro de tu equipo para presentar el proyecto cuando la convocatoria así lo indique. Las habilidades de comunicación permitirán que los evaluadores tengan un claro entendimiento de la propuesta.
Cuando sometes algún proyecto en estas convocatorias existen tres posibilidades: ser descartado por no cumplir con los requisitos establecidos, enfrentarte a proyectos mejor formulados o más atractivos que no te permitan avanzar en la evaluación y por último, resultar ganador o beneficiado.
Si tu proyecto no es beneficiado, no desistas. En cada intento de participación, tu experiencia y visión para formular y participar serán mejores cada vez y seguramente, terminarás por obtener el éxito. Perseverar es la fórmula del empresario exitoso.
Por Dra. Alejandra Herrera M.
Sendatek, Asesores en Innovación
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