Los cheques son una opción que ofrecen las instituciones bancarias para que puedas disponer de tu dinero, la ventaja que tienen sobre el efectivo es la seguridad y siempre que se sepa utilizarlos son una manera ágil para efectuar operaciones comerciales.
Los cheques se pueden clasificar en dos tipos, los negociables, es decir aquellos que pueden endosarse (firmando el beneficiario en la parte posterior del documento) tantas veces como sea necesario (endosos subsecuentes) y los No Negociables aquellos que sólo pueden ser cobrados en la ventanilla del banco por el beneficiario o bien, depositados en la cuenta bancaria de la persona o empresa beneficiaria.
Existen también diferentes formas en que se puede expedir un cheque:
-Cheque al portador, aquel que no indica una persona específica a favor de quien se expide, debe indicar la leyenda “al portador” en el espacio destinado para señalar el nombre del beneficiario. Si te entregan un cheque con esta característica por seguridad deposítalo o cóbralo de inmediato, ya que en caso de extravío o robo podrá ser cobrado por cualquier persona pues no es necesario presentar una identificación, ni escribir los datos del tenedor del cheque al momento de presentarlo.
– Cheque nominativo o a la orden en este caso es indispensable presentar una identificación oficial.
– Cheque de caja que es expedido por una institución para que sea pagado en sus propias sucursales o filiales.
Para tener acceso a los cheques es necesario tener una cuenta bancaria que ofrezca este documento pero hay que saber utilizarlos pues de otra forma pueden causar dolores de cabeza, estas son algunas recomendaciones que la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) hace al respecto de los cheques.
Antes que nada cuando el banco te entregue tu chequera revisa que esté sellada y cuenta los cheques, si no están completos, regrésala de inmediato.
Cada vez que expidas un cheque deberás anotar los datos en el talonario, cuando llegue tu estado de cuenta verifica que coincidan las operaciones, nunca firmes un cheque en blanco.
Ten presente que tu firma puede ser falsificada es decir que esta no es un elemento de seguridad suficiente por ello guarda tu chequera en un lugar seguro y en caso de robo o extravío reporta a tu banco de inmediato.
Al momento de extender un cheque siempre debes tener la seguridad de contar con fondos suficientes para ser cobrado de lo contrario tendrás que pagar comisiones, recuerda que el beneficiario tiene el derecho de cobrarlo cuando lo desee así que no es conveniente hacer tratos con él para que espere.
Para tener el control adecuado de tus finanzas no esperes a que te llegue tu estado de cuenta o verificar que el cheque haya sido cobrado es mejor descontar el importe del saldo de tu cuenta en cuanto lo entregues.
Ariadna Cruz
no entendi ni papa…esto no era lo q buscaba
es verdad…..:(
mala la paginaaaaaaaaaa no sirve pa naaaaa saquenlaaaaaa
tas mal 😛 !!!!
uff me sirvio muxOoo
a mi me }parece bn me ayudo a una actividad