Para quienes el término “flujo de efectivo” suena pero no con precisión, se refiere a un estado financiero que muestra la generación, administración y utilización del efectivo que se ha producido. En función de éste una empresa podrá cubrir sus obligaciones fiscales, con proveedores o empleados.
Dicho estado debe plasmar el manejo de las actividades de operación, inversión y financiación. De esta manera es posible determinar cuál es la capacidad del negocio en cuestión. A su vez proporciona información detallada a los directivos para crear estrategias que hagan crecer a una empresa.
En las actividades de operación se incluyen aquellas que tienen que ver con el desarrollo del objetivo de una empresa, por ejemplo la prestación de sus servicios. Las que refieren a la inversión en activos fijos (gastos necesarios y que se mantienen por más de un año) se llaman actividades de inversión.
Y por último las actividades de financiación: son las adquisiciones de la empresa, también comprende a los socios de la misma y algunas otras formas de financiamiento para el negocio.
El objetivo principal del flujo de efectivo es utilizar los recursos de la mejor forma. En el estado financiero se conoce el origen- destino del dinero y funciona para programar lo que haya que pagar, entre ellos los impuestos que en ocasiones la empresa no toma en cuenta.
De esta manera una empresa sabrá también si está siendo rentable, si los recursos son suficientes o qué le está revelando el estado financiero.
Norma Mtz.
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