El barbero es la persona que tiene por oficio embellecer y rasurar la barba de los hombres, pero también se extiende el sobrenombre a los peluqueros especializados en el género masculino. Sin embargo, esta actividad ha sido sustituida por las estéticas que dan cabida a todas las variables de la moda con tono unisex, ya que en cuestiones de barbería pareciera que todo era muy conservador.
Hoy, Edgar García, dueño y responsable de la firma Boxers, se ha dedicado a rescatar el concepto de las barberías, siendo este un tradicional lugar masculino que curiosamente la mayoría de los hombres de las nuevas generaciones no tuvieron oportunidad de disfrutar, pero les hace falta un lugar donde alguien los consienta y les cuide la apariencia.
“Boxer nace de esta necesidad de arreglarte como hombre sin que estés a lado de la señora que le están haciendo el tinte, vimos el potencial que tenía una barbería” cuenta Edgar, además agrega: “Este concepto nació en Guadalajara y hoy estamos llevando este modelo de negocio mediante franquicias a todo México, estamos por abrir una sucursal en el Distrito Federal, en cinco años ya hemos abierto 3 barberías”.
Tomando en consideración que el mercado cautivo de las barberías se perdió con el tiempo, Boxer es una novedad entre el público masculino, por ello se expande mediante el esquema de franquicias, así demuestra sus ventajas competitivas que van desde un concepto visual muy llamativo que está pensado para los hombres, además de ponerlo en centros comerciales.
“El éxito de esta franquicia ha sido la tenacidad y el trabajo en equipo que hemos hecho todos los involucrados, ya que se ha ajustado el modelo de negocio para hacer una expansión a nivel Nacional, podemos decir que tiene un gran potencial de crecimiento y representa una gran oportunidad de negocio para quienes les interese invertir, ya es un caso de éxito,” comenta Héctor Alcázar, Director Comercial de Alcázar y Compañía, firma que se encargo del desarrollo de la franquicia.
El modelo de franquicia presentado por Boxer cuenta con dos opciones una que es la “Petit” que tiene un costo aproximado de $567,000 pesos o el modelo “Master” de $845,000 pesos; en ambos incluye la cuota de franquicia, la capacitación, los manuales, supervisión constante de la atención al cliente, software de administración.
“Para nosotros como empresarios que vamos creciendo es fundamental contar con el apoyo de los expertos, ya que nunca sabes de todo y hay cuestiones legales que son indispensables para estar seguros de hacer negocios, por lo que el papel de Alcázar y Compañía ha sido determinante para el crecimiento de nuestro proyecto” afirma García.
Entre las funciones de un barbero figuran cortar el cabello utilizando tijeras; perfilarlo y cortar las patillas usando cuchilla y rasurar el cuello utilizando maquinilla eléctrica. También aplican crema para afeitar a la barba y la cortan o perfilan con navaja. Utilizan shampoo para lavar el cabello, aplican lociones aftershave para hidratar la piel de la cara y cerrar los poros. Del mismo modo, aplican colonias para perfumar el cabello y fijador o laca para mantener su forma una vez terminado el trabajo, hacen manicure, pedicure; limpieza facial, corporal y depilaciones. Todo para caballeros.
En términos de negocio, el retorno de la inversión para un franquiciatario es de 24 meses, las regalías son del 5% con un tope de 6 mil pesos mensuales, además ésta no se cobrarán durante los primeros 6 meses a fin de que el inversionista llegue a su punto de equilibrio.
Adriana Maass