En México existen más de 4 billones de pesos listos para invertirse en compañías que decidan salir al mercado bursátil. Por ello es importante que los empresarios conozcan con más detalle las oportunidades y beneficios que ofrece la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), dijo José Javier Jaime Peralta, Socio de Ernst & Young (EY) líder de emisiones para México.
Los inversionistas buscan nuevos horizontes. Quieren alternativas más allá de los mismos jugadores de la Bolsa. Por ejemplo las Sociedades de Inversión de Fondos para el Retiro (Siefores) están ávidas de nuevos sectores y jugadores; las empresas de las industrias energética, aeroespacial y automotriz (y todo su ecosistema) hoy por hoy son muy buenas candidatas para incursionar en la Bolsa.
“Los fondeos a través de los mercados han sido poco explorados en México, es por ello que más empresas conozcan las diferentes alternativas de fondeo que tienen a su alcance en el mercado bursátil mexicano, así como las ventajas de acceder a este tipo de fondeo y la preparación que las empresas deben tener antes de dar este paso tan importante en la vida de las compañías”, comentó el especialista.
Explicó que al acceder a los mercados públicos las compañías aumentan su valor, fortalecen su estructura en distintos aspectos como: procesos y gobierno corporativo; obtienen reconocimiento financiero, mejoran su imagen y proyección, y flexibilizan las finanzas de los empresarios.
Agregó que las empresas deben determinar cuál es el fondeo que mejor le sienta tomando en cuenta el ciclo de vida en el que se encuentran, además de fortalecer y adecuar sus procesos, sistemas y controles internos, y transitar de manera ordenada la manera de gestionar sus actividades, pasando de un modelo familiar a un modelo institucional mediante el establecimiento del gobierno corporativo.
“Éste proceso de evolución institucional le permitirá a las empresas perdurar en el tiempo, ya que en México históricamente solo el 4% de las empresas constituidas han sobrevivido a la tercera generación”, destacó el especialista de EY.
También este paso en la vida institucional de las empresas va acompañado de cambios en las normas contables de reporte financiero para que las empresas puedan compararse con compañías de la misma industria de talla internacional, y de una estrategia fiscal que le permita pagar correctamente sus impuestos, comentó.
De acuerdo con el socio de EY el entorno de negocios en México ha ido cambiando de manera positiva en los últimos años, lo cual ha generado que las empresas entren en una etapa de expansión importante. “Lograr crecimientos sostenidos a tasas de dos dígitos genera invariablemente la necesidad de obtener fondeo de largo plazo”.
“Las fuentes de fondeo en México se han ido diversificando, por lo que el crédito bancario ha dejado de ser la única fuente de financiamiento a la que tienen acceso las empresas, aunque sí sigue siendo una de las fuentes más buscadas por el empresariado mexicano”, puntualizó.
Sin embargo, dijo, los empresarios deben conocer más acerca de las oportunidades y beneficios del mercado bursátil como fuente de fondeo pues agregan valores cualitativos a las compañías que buscan trascender al ‘siguiente nivel’ de negocios e iniciar un proceso de expansión.
Algunas de las fuentes de financiamiento existentes son: aportaciones propias de capital, endeudamiento bancario, fondos de capital semilla, fondos de capital emprendedor, fondos de capital privado, a nivel de transacciones privadas, así como emisiones en los mercados bursátiles (capital o deuda), por mencionar algunos.
Redacción Pymempresario
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