Apostar por un proyecto emprendedor, que aún no se consolida y no está probado y comprobado, de entrada representa un alto grado de riesgo. Es por ello que los emprendedores deben esmerarse en el desarrollo del pitch, la descripción del proyecto y la capacidad de convencer a cualquier inversionista.
El camino de los emprendedores es difícil, y en su trayecto buscará inversión varias veces. Este es un motivo poderoso para que dominen una buena presentación de su startup.
“La pasión en un pitch está sobrevalorada. Como inversionista, escuchas pitches de emprendedores que son capaces de transmitir emoción, pero eso no significa que sea una buena inversión; por el contrario hay emprendedores que te duermen porque hablan muy pausado, pero resulta que tienen un negocio magnífico”, afirmó González Gasque.
Es importante que al llegar el momento de levantar la inversión, los emprendedores eviten a toda costa los tres peores errores:
. Primer error: Darle más importancia al pitch que al negocio. Es recomendable enfocarse también en la viabilidad económica, un plan de negocios y un cuidadoso seguimiento de las métricas de crecimiento de negocio.
“Hay emprendedores que son capaces de venderte hasta un helado en Alaska, te pueden vender lo que quieran, que tienen un dominio impresionante de su área, pero al final resulta que se terminan aburriendo de sus propias compañías y dejan todo a medias”, señaló González Gasque.
Cerrar una inversión nunca debe verse como una meta en sí misma, pues se trata de un mecanismo para alcanzar objetivos.
. Segundo error: Entregar un plan de negocios sin sentido. Las empresas con un plan de negocios aumentaron su financiamiento al doble en un periodo de 12 meses, reveló un estudio por el Babson College. Además de darle la confianza necesaria a los inversionistas.
Sin un plan de negocios realista, en el mercado correcto y con el potencial de monetizar, cerrar inversión será una tarea imposible.
Es importante revisar las habilidades técnicas, las habilidades blandas, pero sobre todo considerar lo que el emprendedor está construyendo.
“Necesitas ver los fundamentos, el análisis técnico, las valuaciones, la corrección y claridad en su modelo de negocio y de monetización”, sugirió González Gasque.
Tercer error: Confiar de más en la pasión. “Siendo realistas, hay emprendedores súper apasionados con ideas malísimas y te generan una empatía al contarte tu proyecto pero ni loco invertiría en ellos”, compartió González Gasque. “Es preferible agarrar ese dinero y dárselo a la señora que está vendiendo comida afuera del metro porque frente a una startup mal planeada ella tiene más posibilidades de escalar el negocio”, añadió el directivo.
Asimismo aconsejó a los emprendedores a tener claridad en las métricas clave de su empresa, proyecciones claras de a dónde podría llegar el negocio y sobre todo fundamentos para las cifras que presentan.
Redacción
Recuerda dejarnos un comentario
RECOMENDAMOS: Prepara a tu Startup para enamorar a los inversionistas
Te compartimos el siguiente vídeo: