El Sector de Servicios Financieros es fundamental para estimular el crecimiento económico y crear empleo, de acuerdo con un análisis de KPMG International, red global de firmas multidisciplinarias que brindan servicios de Auditoría, Impuestos y Asesoría.
El documento Cumbre del G20 en Brisbane – Una nueva agenda para los Servicios Financieros (Brisbane G20 Summit: A New Agenda for Financial Services), destaca que el Sector de Servicios Financieros podrá acelerar las estrategias previamente acordadas por el G20, como incrementar la inversión en infraestructura, a través, por ejemplo, del ajuste de las reglas de capital y liquidez en los bancos que ofrecen financiamiento a largo plazo, lo cual debe impulsar la inversión.
Asimismo, el estudio advierte que no se están reconociendo las consecuencias inesperadas de la agenda de reformas de regulación financiera, las cuales están implementándose de forma desigual en las diferentes jurisdicciones, provocando costos regulatorios altos, incertidumbre y menor disponibilidad de productos financieros para impulsar el crecimiento económico.
Preocupa, asimismo, el reducido número de participantes en el mercado, disminuyendo las opciones para sustentar mercados competitivos e innovadores.
El análisis previo a la Cumbre del G20 hace un llamado para:
– Revaluar el costo-beneficio de algunas de las reformas regulatorias con base en la evidencia de sus resultados
– Priorizar futuras reformas, y dar mayor certidumbre al calendario de implementación de las mismas
– Acordar la reducción de las inconsistencias entre las regulaciones nacionales, que aumentan los costos y desaceleran el crecimiento
Este análisis sugiere a los bancos intensificar sus esfuerzos para recuperar la confianza y resolver los retos culturales que enfrentan en diferentes regiones. Todos aceptan que el sector ha alcanzado avances significativos en el frente de capital, pero aún tiene diversos retos con el Gobierno Corporativo y la cultura de gestión de riesgos.
La administración de cada organización debe desarrollar una cultura de gestión de riesgos propia para su organización. En este sentido, los informes del Consejo deberán incluir evidencia incuestionable, que se pueda compartir con los supervisores, mostrando que están tomándose las medidas adecuadas. Si esto se hace correctamente y se establecen restricciones con precisión, se recuperará la confianza con la sociedad, lo cual permitirá a los bancos apoyar a la economía.
Jorge Peña, Socio Líder Nacional de Servicios Financieros de KPMG en México, destacó que: “El G20 puede ayudar a garantizar un equilibrio entre el manejo de la crisis del pasado, y fomentar el crecimiento y el empleo. Se requiere una nueva relación entre el sector y los reguladores que promueva mayor estabilidad y estimule el crecimiento económico”.
El análisis sugiere cuatro medidas que se requieren para refinar la agenda:
1) Incentivar a los bancos a realizar préstamos a pequeños negocios, para infraestructura y financiamiento del comercio – Ajustando la regulación para que a la bursatilización de alta calidad de préstamos bancarios se le dé el tratamiento de bonos garantizados en requerimientos de capital y liquidez.
2) Alentar a los aseguradores y a otros inversionistas a largo plazo, a prestar fondos para infraestructura y a pequeñas empresas – Creando un régimen regulatorio y un entorno fiscal que ayude a los aseguradores a prestar fondos a proyectos de capital a largo plazo.
3) Fomentar a los administradores de activos para que inviertan más en infraestructura – Desarrollando un marco propicio para los Fondos Europeos de Inversión a Largo Plazo (ELTIF, por sus siglas en inglés) para permitir la inversión en activos no líquidos a largo plazo, como proyectos de infraestructura y bienes raíces.
4) Desarrollar nuevos y dinámicos mercados de capital – Otros países y áreas económicas deberán aplicar las lecciones que aprendan de Estados Unidos, para desarrollar una cultura de financiamiento mediante fondos propios, mercados de capital más profundos y más líquidos, sustentados por regímenes regulatorios y fiscales que incentiven la inversión.
Jorge Peña concluyó: “Las discusiones y decisiones que tienen lugar en Brisbane, cuentan con el potencial para estimular la inversión, la cual creará un significativo número de nuevos empleos y, como resultado de ello, se acelerará la recuperación económica mundial. El G20 está en posibilidades de sentar las bases para que el Sector de Servicios Financieros renueve su aportación para la recuperación económica mundial”.