El sector agroindustrial es uno de los mayores generadores de bióxido de carbono que se emiten a la atmosfera debido a que involucra tanto a la producción agrícola como de alimentos industrializados. La agencia de noticias RT publicó recientemente el artículo “Qué tienen en común las tres pandemias que nos amenazan”, en él se plasman los resultados de tres años de investigación en materia de cambio climático, desnutrición y obesidad; cuyo origen, destacan los científicos, tiene una sola explicación: “La industria de los alimentos”.
Los resultados de dicho artículo, nos invitan a reflexionar sobre la necesidad de nuevas miradas encaminadas a repensar el sector agroindustrial en su conjunto. Desde la academia consideramos que estas miradas son la sustentabilidad y la responsabilidad social empresarial. La primera la entendemos como la necesidad de satisfacer las necesidades del presente sin comprometer las necesidades de las futuras generaciones, mientras que la segunda está asociada a una forma ética de hacer negocios en la que el equilibrio entre las dimensiones social, ambiental y económica, está presente de manera permanente en la estrategia empresarial.
La incursión de las Pequeñas y Medianas Empresas (PyME) en estos nuevos enfoques es aun limitada, no obstante que es esencial como parte de los procesos de innovación en emprendimientos de pequeña escala. Al respecto, la Encuesta Nacional sobre Productividad y Competitividad de las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (ENAPROCE) realizada en el año 2015, revela cierto nivel de indiferencia antes estas perspectivas. Véase algunos los resultados de la encuesta en la siguiente tabla.
Estos resultados muestran la posibilidad de intervenir en la construcción de la mejora continua de las PyME por medio del desarrollo de modelos integrales y de participación en la cadena de valor. Por el momento, ante un incipiente entorno que favorezca la aplicación de un mayor número de políticas públicas sustentables y con enfoque de responsabilidad social, son los esfuerzos individuales los que continuarán siendo los puntos de conexión entre la sociedad y su necesidad de cambio.
Dr. Humberto Muñoz Grandé en colaboración con Mtra. Gabriela Sánchez Moctezuma, Académicos de la Facultad de Responsabilidad Social de la Universidad Anáhuac México
Redacción
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