El sector empresarial acapulqueño sufre uno de sus peores momentos, debido a la creciente ola de violencia que azota al puerto guerrerense y que ha motivado el cierre o reducción en horarios laborales de hasta 625 negocios en tan sólo año y medio. Por esta situación, representantes de la Canaco, Canacintra y Coparmex pidieron al gobierno federal una solución inmediata a los problemas de inseguridad que amenazan diariamente sus fuentes de trabajo.