La entrada a nuevos mercados para los productos de telecomunicaciones y equipos inalámbricos, es un desafío cada vez más complicado ante las regulaciones internacionales del sector, por lo que es importante contar con una solución líder de carácter internacional que gestione la certificación de este tipo de dispositivos y facilite la incursión en otros países, así como de aparatos eléctricos, electrónicos y electrodomésticos de manera completa, exacta y confiable.
De acuerdo a la Secretaría de Economía (SE), la meta del valor del mercado de Tecnologías de la Información (TI) para el 2024 es de 57.56 millones de dólares (mdd) y cifras de la consultora IDC, señalan que en el cierre de 2015, el mercado de Tecnologías de Información y Comunicaciones (TIC) sumará cerca de 60 mil millones de dólares en México.
Ante la tendencia de que este tipo de dispositivos tengan cada vez menos volumen y peso, ofreciendo un mayor rendimiento y potencia de procesamiento, y que a la vez consuman menos energía y que garantice a los fabricantes e importadores mexicanos del sector adecuarse a la seguridad, eficiencia y calidad que aseguren su entrada y permanencia en el mercado internacional.
Calidad que brilla en el mundo
Como es sabido, la calidad de productos mexicanos a nivel internacional, es ya reconocida a nivel mundial en productos de exportación de industrias como: electrónica, telecomunicaciones y dispositivos médicos, entre otras.
Datos de ProMéxico, destacan que durante 2012, México fue el principal exportador de pantallas planas –posicionándose por encima de países altamente competitivos de Asia- además de ser el quinto exportador de computadoras a nivel mundial.
A pesar de lo anterior, día con día las empresas del sector, encuentran mayores retos en la comercialización de sus mercancías, debido principalmente a las regulaciones internacionales en el tema. Pues de acuerdo a ProMéxico, algunos de los principales errores cometidos al exportar son la falta de conocimiento del mercado y el desconocimiento de la mecánica de exportación.
En cada país, existen diversas normas técnicas y específicas que garantizan un aparato de manera completa, exacta y confiable. Por ejemplo para la comercialización de electrónicos en México, se necesitan los certificados de conformidad con las Normas Oficiales Mexicanas (NOM).
Sin duda, el reconocimiento internacional de la calidad en productos de exportación muestra un futuro promisorio, que de la mano a la mejor preparación para exportar y conocimiento del mercado por parte de productores y exportadores, continuará haciendo de las exportación uno de los grandes pilares de la economía nacional.
Gabriel Mata, gerente de productos de TÜV Rheinland México
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