Las instalaciones de una empresa son parte de su imagen pública y hay que fijarse en todos los detalles, así como cuando usted va a las oficinas de cualquier cliente se fija en si están limpias, su ubicación y el acomodo, los demás lo harán con las suyas es por eso que es tan importante que sea algo adecuado.
Cuando se trata de encontrar un espacio adecuado para el negocio, se debe tomar en cuenta las características de la empresa y antes de optar por una opción en particular, tome en cuenta.
¿Es una buena ubicación?
¿Cómo son las condiciones físicas del inmueble?
¿Necesita mucho o poco espacio?
¿Hay que pintar, arreglar, etc.?
Cuestiones como la ubicación, el desarrollo de la zona y hasta las construcciones vecinas o los alrededores aumentan o disminuyen el costo de los inmuebles. Piense en qué tipo de zona es: ¿accesible? ¿Sus clientes irían a visitarle? ¿Vale la pena lo que pagaría?
Elegir una buena oficina, sobre todo si está en la etapa del emprendimiento, no es una tarea fácil, pues tiene que revisar también la situación jurídica del inmueble y en caso de ser una renta del arrendador, eso le dará cierta seguridad de saber con quién tratará y de asegurarse que no haya ningún ilícito de por medio, de lo contario puede correr el riesgo de que se dañe la reputación de su negocio.
Entre los factores que determinan la rápida renta y/o venta de una oficina está el precio, la forma de pago, las condiciones del edificio o casa, según sea el caso, la zona donde se ubique, si es de fácil acceso.
También es necesario que tome en cuenta los gastos derivados de la operación de su negocio, así tendrá presupuestos más definidos y evitará contratiempos que le lleven al incumplimiento de los pagos.
Con todos estos aspectos bajo control lo único que resta es que tenga una búsqueda exitosa.
Adriana Maass
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