Si nos planteamos la posibilidad de producir bienes o servicios con base en la sustentabilidad, tenemos que pensar en desarrollar las estrategias que nos sirvan e referencia para lograr el éxito de nuestra empresa.
Son varios los factores que analizar; por una parte la normatividad ambiental vigente en lo que se refiere a la protección ambiental y, por otra parte, la respuesta de los miembros de la organización ante el planteamiento de la creación de una política general medioambiental incluyente, tanto en la propuesta como en la aplicación.
Se debe comunicar a todo el personal, tanto al que participe en la elaboración de la política medioambiental, como al que no deseó participar, acerca del compromiso que todos y cada uno tienen hacia la actuación “de la empresa”, que en realidad tiene que ver con el comportamiento de cada trabajador. Para esto se requiere la construcción de un liderazgo que cree las condiciones para comprometer a todos los que forman parte de la organización, considerando que se está llevando a cabo un pacto dentro de la empresa. Este liderazgo debe estar en el más alto puesto de la empresa.
No se trata de modificar solamente la actitud de los colaboradores sino de concientizar a todos para que acepten el compromiso, para lograrlo es positivo buscar explicaciones en conferencias que sean impartidas por grupos ecológicos ajenos a la empresa y, en relación con los planteamientos, emitir programas de actividades medioambientales.
Es muy importante dar a conocer a los clientes y a las autoridades lo que la empresa está realizando, ya que la publicidad y propaganda que realicemos de nuestros planes y actuaciones de mercadeo verde tendrán que ser reconocidas por los consumidores, por lo que es adecuado llevar a cabo una investigación de mercado que nos haga saber la respuesta de los consumidores. El programa de mercadotecnia verde debe ser permanente.
Dr. Leopoldo Antonio Días Toledo
Líder de opinión Universidad La Salle