La tecnología de búsquedas ha permitido a millones de usuarios encontrar información mediante el simple paradigma de un cuadro de texto para búsquedas. Esta interfase sencilla ha demostrado ser no sólo funcional, sino también barata. Una interfase coherente no requiere aprendizaje previo para poder acceder a la información, independientemente de la complejidad y diversidad de los sistemas o datos que se presenten.