De acuerdo con analistas de HSBC, la respuesta mexicana a una desaceleración en EE.UU. será menos dañina ahora que en el pasado debido a que la recuperación del mercado mexicano hace menos dependiente a la economía de fuentes externas de crecimiento. En general, esperan que el consumo continúe recuperándose en 2011 y retome su patrón histórico de crecimiento más rápido que el PIB.