Los imprevistos pueden suceder en cualquier momento; por eso, debes estar preparado y sentirte tranquilo de que cuentas con un gran apoyo ante situaciones difíciles.
Un seguro de gastos médicos mayores ofrece la tranquilidad de saber que estás preparado para afrontar económicamente un posible accidente o enfermedad. Te brinda a ti y a tus familiares la tranquilidad de contar con atención médica y toda una gama de servicios médicos, hospitalarios y complementarios, integrados a excelentes soluciones para diversos problemas de salud.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año 5% de la población mundial es arrojada a la pobreza por tener que pagar servicios de salud al requerirlos. La cifra es alarmante: ese porcentaje suma un total de 100 millones de personas.
Este fenómeno se debe a que las poblaciones envejecen y cada vez más personas sufren enfermedades crónicas que requieren de tratamientos costosos y especializados. Aunque la OMS ha dado recomendaciones a los países para recaudar más fondos para la salud pública y para que los gobiernos puedan ofrecer una cobertura más amplia, equitativa y eficaz; las opciones de seguros médicos privados se presentan, hoy más que nunca, como una de las mejores opciones para personas económicamente activas para tener una cobertura amplia en materia de salud sin tener que arriesgar el patrimonio o la vida.
En México, según datos de la OMS, la esperanza de vida al nacer es de 72 años para hombres y 77 años para las mujeres. Sin embargo, la esperanza de vida Sana es mucho menor: de 63 años en hombres y 68 años en mujeres.
Bajo este contexto, te ofrecemos algunas recomendaciones que pueden hacer la diferencia a la hora de contratar un seguro de gastos médicos mayores para tu familia.
1. Acércate con un agente de seguros. Los seguros son herramientas complejas que además implican un contrato, por lo tanto, el papel del agente como asesor es básico. Comprueba que tu asesor cuente con cédula vigente de la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas.
2. Compara servicios y precios. Muchas veces la decisión por un seguro se basa en el precio. Sin embargo, lo ideal es hacer una evaluación profunda de las ventajas y desventajas de cada opción a considerar, para tomar decisiones informadas.
3. Evalúa la cobertura necesaria para tu familia. Factores como la prima, la suma asegurada, el nivel hospitalario y la cobertura son la base de tu póliza. Elegir la opción que mejor se adecue a las necesidades de tu familia es fundamental, ya que esto garantiza que obtendrás los mayores beneficios cuando alguno de tus seres queridos tenga que usar el seguro.
4. Considera la cobertura adicional y otros servicios. Estos elementos pueden hacer una gran diferencia a la hora de calificar el valor agregado de tu seguro. Servicios como la cobertura dental, por ejemplo, pueden ser factores decisivos que quizá quieras contratar de acuerdo con la edad de tus hijos y el nivel de uso que le des a opciones como esta.
5. Valora la experiencia. No sólo se trata de considerar la publicidad que has visto de la compañía y sus productos, sino también de tomar en cuenta los años que tiene trabajando en el país y sobre todo, que sea una compañía legalmente establecida en México. En la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas puedes consultar la lista de las compañías que cumplen con todos los requisitos para ofrecer servicios en el país. http://www.cnsf.gob.mx
6. Verifica que la aseguradora te garantice renovación vitalicia. Este punto es fundamental, ya que existen seguros que sólo te aseguran hasta cierta edad sin posibilidad de renovarlo, pero existen otros en donde te aseguran de manera vitalicia independientemente del estado de salud o tu edad, siempre y cuando se encuentre pagada tu póliza.
7. Revisa a fondo la cláusula de preexistencia por antigüedad. Cuando hay alguna enfermedad que no se haya declarado por ignorar su preexistencia algunas aseguradoras rechazan el pago de cualquier servicio relacionado con el padecimiento. No obstante, asegúrate de que la compañía que elijas cubra las preexistencias siempre y cuando no haya habido manifestación alguna de síntoma relacionado con la enfermedad en un periodo largo de tiempo.
8. Pregunta por los tiempos de espera y los padecimientos que lo requieren. Lo ideal es que los tiempos de espera para atender padecimientos específicos sean los menores. De esta manera, en menos de lo que imaginas podrás gozar de todos los beneficios de tu póliza.
9. Considera los beneficios fiscales. Hay productos que ofrecen componentes como descuento o deducción para el pago de impuestos. Consulta con tu asesor si los productos que te interesan cuentan con esta modalidad.
10. Mantén hábitos saludables. El que tu familia y tú tengan un estado de salud envidiable, no sólo puede ayudarte a reducir el riesgo de alguna enfermedad, sino también puede ser un factor clave que influya en la cotización de tu póliza, principalmente en la cobertura para adultos.
Sofía Belmar
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Al contratar el seguro pues si checar bien las coberturas por que siempre pasa de que ni enterados y reclamamos cosas que el seguro no quedo en cubrirlas je y pues para los que aun no cuentan con un seguro les recomiendo esta pagina espero les sirva saludos y sobretodo que eres asesorado por un agente
http://www.agentesonline.net