En el tercer trimestre, las cuentas externas reflejan la recuperación económica, aunque perfilan la desaceleración de las exportaciones y la persistente debilidad de la demanda interna, así como una importante entrada de recursos en la cuenta de capital.
La cuentacorriente registró un déficit de 1.8 mmd, de menor magnitud a nuestra expectativa y a la del consenso, y también sensiblemente abajo del reportado hace un año (-3.6 mmd).
En términos anuales, el avance de las exportaciones (manufactureras y de petróleo) y la fuerte disminución en el déficit de servicios factoriales y la incipiente reactivación en el flujo de remesas, permitieron disminuir el déficit respecto al del año pasado, ello a pesar del repunte de la importación de mercancías y el aumento del déficit en servicios no factoriales. El menor déficit en la cuenta corriente respecto a nuestra expectativa, amplía las posibilidades de que hacia finales del año termine en un nivel ligeramente menor a 0.7% del PIB de nuestra actual estimación.
En paralelo, la entrada de recursos por IED registró un incremento anual de 5.0% para alcanzar un nivel de 2.1 mmd (el acumulado al tercer trimestre alcanza 14.4 mmd); en el mismo sentido, la inversión en cartera neta fue también favorable, alcanzó 4.6 mmd. Ambos rubros de inversión extranjera (6.7mmd), más que compensaron las salidas de capitales registradas en el renglón de activos de la balanza de pagos (4.1 mmd).
Así, la cuenta de capital registró una entrada neta de recursos por 8.9 mmd en el tercer trimestre con el saldo neto de los cuentas corriente y de capital, y restando una salida neta de recursos por 0.08 mmd registrada en el rubro de errores y omisiones, la reserva internacional aumentó en 6.9 mmd ubicando su saldo al término del tercer trimestre en 108.3 mmd.
Arturo Vieyra, analista de Banamex