Conscientes de la importancia que tiene la imagen de un producto, como un aspecto imprescindible para avanzar en el proceso de comercialización, el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO) y la Secretaría de Promoción Económica de Jalisco (Seproe) impulsan el Proyecto de Aplicación Profesional “Diseño de Imagen”, mediante el cual estudiantes de la universidad colaboran con PyMEs en el diseño de su marca y su manual de identidad gráfica.
En la entidad el 98% de las micro y pequeñas empresas, la mayoría negocios familiares, no cuentan con una marca ni imagen que distinga las cualidades de sus productos respecto a su competencia.
Un ejemplo de ello es la quesera del empresario Jesús Robles quien adquiere alrededor de 3 mil 500 litros de leche al día para fabricar sus productos lácteos en Tomatlán. Robles produce una tonelada y media de quesos frescos, adoberas, jocoque, requesón y panelas que se llevan a Puerto Vallarta con el propósito de vender, al por mayor, a distribuidores ambulantes y repartir pedidos en las abarroteras.
La única manera que tiene este negocio para distinguirse entre los otros es “la fama” pues los productos carecen de una marca y de etiquetas que describan el valor nutricional, requisitos imprescindibles si se busca avanzar en la cadena productiva.
Ante esta situación común desde octubre de 2008 se puso en marcha el proyecto Diseño de Imagen, como una asignatura en la que los alumnos de los últimos semestres de la Licenciatura en Diseño aplican los conocimientos adquiridos para crear la marca de productos de micro y pequeñas empresas.
“La mayoría de los pequeños empresarios venden productos de excelente calidad, pero de imagen sumamente pobre. No tienen marca, no tienen etiqueta y usan envases generalizados; a consecuencia de esto no pueden tener una comercialización viable”, explicó el académico Carlos García.
Desde su creación este programa ha desarrollado la marca para productos como tequila, tortillas de nopal, salsa picante, agua de sabor, lácteos, adobo, rompope, dulces típicos y pay de elote, entre otros.
Todas las empresas beneficiadas de este proyecto han invertido una cantidad de mil 500 pesos para pago de copias, impresiones y demás material de trabajo, costo mucho menor al que pagarían en una agencia externa donde este tipo de servicio se cotiza por arriba de los 50 mil pesos.
“El desarrollo de la imagen de un producto se ha convertido en un elemento imprescindible para avanzar en el proceso de comercialización, ya no tenemos el hábito de comprar a granel, ahora necesitamos la identificación del producto, la imagen ya es un valor agregado”, señaló Pedro Barrios, director General de Comercio Interior y Abasto, de la SEPROE.
Ariadna Cruz